Cómo se fabrica un anticatalán

LIBERTAD DIGITAL 01/08/13
JOSÉ MARÍA ALBERT DE PACO

A la solicitud de recusación del juez Francisco Pérez de los Cobos por parte de Artur Mas se ha sumado la edición catalana de El País, que el domingo informó de que el presidente del TC es autor de un libro de aforismos que lleva por título Parva memoria, y que fue publicado en 2006 por la editorial Tirant Lo Blanch. En el texto, el periodista Pere Ríos acusaba a Pérez de los Cobos de arremeter «contra los catalanes y el nacionalismo», o, como decía uno de los subtítulos, «contra Cataluña». Ríos traía pruebas. Esta reflexión, por ejemplo: «Cuando un catalán está satisfecho lo expresa diciendo: ‘a mí, ya me va bien’». A su juicio, «la frase se antoja un abono del tópico sobre la insolidaridad catalana». Esta otra: «El dinero es el bálsamo racionalizador de Cataluña», que, lamentablemente, no está traducida al lenguaje de la tribu, pero que ya traduzco yo: «Mierda de catalanes, no merecen nada».
La primera de las reflexiones es muy parecida a una que tiene Albert Boadella, y que dice aproximadamente que uno de los males de Cataluña (extensible, claro, a toda España) es el adagio ‘ja està bé així’ [‘ya está bien así’], con que abrochamos lo mismo un roto que un descosido, y que lejos de implicar desprecio remite, bien que vagamente, a ese regeneracionismo del que el martes nos hablaba Espada. O en otras palabras: a la autocrítica, que para el nacionalismo siempre es autoodio.
«El libro», prosigue Ríos, «contiene frases despectivas con ciudadanos de otros países, aunque ninguna tan contundente como la que afirma que ‘los ingleses han aprendido de sus gatos a lavarse’». Las aguas llegaron más arriba: «La cita evoca la que pronunció en 2003 otro presidente del Tribunal Constitucional, Manuel Jiménez de Parga. ‘Cuando en Andalucía teníamos fuentes de distintos colores y olores algunas de esas nacionalidades históricas no sabían lo que era el baño semanal’, dijo». Y así, echando a las fuentes de (c)olores de Jiménez de Parga el abono antojadizo de la insolidaridad, Ríos fabricó otro anticatalán. Y además de verdad, no como lo del PP y su factoría de independentistas.
Lo peor de la noticia, sin embargo, lo que mueve de veras a la melancolía por lo que fue la edición de Cataluña de El País, no son las invenciones, sino las omisiones. Cuenta Ríos que De los Cobos, «de 1994 a 1997 pasó por la Universidad de las Islas Baleares. El recuerdo que guarda tampoco parece muy grato. ‘El mallorquín ve en su propio interés una fatalidad, algo inevitable de lo que no se puede escapar. ‘I jo què hauria de fer?‘ (¿Y yo qué debería hacer?)’, escribe». Es probable que fuera en la Universidad de Baleares donde De los Cobos conociera al profesor Cristóbal Serra, uno de los grandes hacedores de aforismos de las letras españolas y, para el caso que nos ocupa, autor del prólogo de Parva memoria. Se entiende, no obstante, que Ríos no dé cuenta de ese detalle, pues eso, en su prosa de caballería, equivaldría a decir que el sabio Cristóbal Serra, celebrado, entre otros escritores, por Pere Gimferrer, Octavio Paz o Joan Perucho, fue, sobre todo, amigo de anticatalanes y quién sabe si anticatalán a secas.