Hablábamos en días pasados sobre los protagonistas del Gobierno de la Gente, que en realidad es el Gobierno de la Gentuza. No se salva ni uno a pesar de ser tantos los candidatos, aunque cabe destacar que en número han sido claramente superados por el Ejecutivo de Lula de Silva, con 37 ministros. Entre toda la chusma que lo integra tengo para mí dos candidatos señeros: Fernando Grande Marlasca y Félix Bolaños, porque no se pueden acoger, como la mayoría de sus homólogos a la atenuante (en algunos casos eximente) de ignorancia completa; ellos venían con estudios.
Hoy toca hablar de Bolaños, porque ayer se sintió obligado a hacer un ajuste de cuentas a la oposición y lo primero que cabe destacar es que fueron los socialistas los verdaderos creadores del maniqueísmo, no aquel filósofo persa del siglo III. Toda la comparecencia de Félix Bolaños se redujo a: nosotros somos Ormuz, ellos son Ahrimán, pero tampoco es un invento suyo. En estos días hemos vuelto a tener noticia de Mª Teresa Fernández de la Vega y su financiación nada ortodoxa por la trama Azud, así como de su empadronamiento fraudulento para las generales de 2008 y aquel momento glorioso en que pervirtió a los escolares del instituto La Senda de Quart de Poblet: «el modelo que representa el presidente de izquierdas, de centro-izquierda, que mira para el futuro, que tiene la mirada positiva, que es optimista, que cree en la gente, y otro modelo, que representa Rajoy, que es el modelo del miedo, de introducir miedo con todo, desconfianza y que mira más al pasado que al futuro”.
Félix Bolaños intervino desde La Moncloa con algo parecido a una rueda de prensa: el Gobierno es el futuro, el PP es el pasado, al tiempo que nos invitaba a recordar octubre del 17 frente a la armonía social vigente hoy día, a nosotros no nos hacen referendos. “El proceso soberanista ha terminado y eso no lo dice el Gobierno de España, ni lo dice el PSOE. Lo dicen los líderes independentistas”. Vaya por Dios, me habré despistado cuando cantaban la gallina. Alcanzó su mayor brillantez expositiva al decir: “El PP cada vez se parece más a Pierre Nodoyuna”. Tampoco estuvo mal al subrayar que el Gobierno al que todavía pertenece ha reducido en cinco puntos la inflación. Vamos a ver, Bolaños, estos conocimientos sí están al alcance de un tipo que ha entrado en el Banco de España por oposición. Pasar del 10 al 5% en el crecimiento de los precios no es reducir en cinco puntos la inflación, es registrar una inflación del 5%. Lo dicho. El Gobierno de España es Ormuz, Núñez Feijóo es Ahrimán.
Miguel Tellado, que es el vicesecretario de Organización del PP, también intervino ayer. Tenía razón al criticar la hazaña de Rocío Monasterio al tirarle los presupuestos a Ayuso. También criticó la moción de censura que Vox quiere ponerle a Sánchez. Dice que no, que mejor las elecciones. El asunto es que sobre esto la única capacidad decisoria la tiene Pedro Sánchez. Si Tellado recuerda la moción de censura contra Rajoy comprenderá que en algunas ocasiones sí es efectiva. No es obligatorio asumir el papel del mal que les vienen asignando los otros.