EL MUNDO – 20/08/14
· Ciudadanos recogió ayer el guante lanzado por Francisco Sosa Wagner y expresó su voluntad de «colaborar» con UPyD.
· Sin embargo, el partido de Albert Rivera pidió primero al de Rosa Díez que «aclare su discrepancia» sobre el asunto, porque varios dirigentes de UPyD se opusieron a su eurodiputado.
«La discrepancia es suya y son ellos los que tendrán que ponerse de acuerdo», dijo Carina Mejías, portavoz de C’s en el Parlamento catalán, que también recordó que Rivera siempre ha sido partidario de algún tipo de acuerdo, al menos electoral, con UPyD para «fortalecer España desde un proyecto común».
Rivera publicó ayer un tuit claramente alusivo al artículo de Sosa Wagner en EL MUNDO en el que pedía una colaboración entre partidos: «En la situación que vive España serán necesarias personas a las que nos importe más nuestro país que las siglas de nuestro partido».
El presidente de C’s, cuyo partido consiguió dos diputados –frente a los cuatro de UPyD– en las últimas elecciones europeas, ha defendido tradicionalmente que si no había sido posible una mayor colaboración es por cuestiones personalistas. En opinión de este partido, «las bases de C’s y UPyD piden» un mayor entendimiento, y la carta de Sosa Wagner «abre un nuevo espacio de debate».
Sin embargo, la idea del eurodiputado de UPyD recibió tantos apoyos internos –por ejemplo, el de Fernando Savater– como críticas: el diputado Toni Cantó se posicionó con las tesis oficiales.
Lejos de que el debate propuesto por Sosa Wagner diera algún fruto y UPyD se aviniera a abrir una reflexión, el asombro por las palabras del eurodiputado fue la única reacción oficial de la dirección. Rosa Díez no entró de forma abierta a este debate, pero dejó un enigmático mensaje en su cuenta de Facebook aprovechando la efeméride de la muerte de Groucho Marx. «Pues eso: donde estén las lentejas (es un decir) que se aparquen los principios», escribió, y lo acompañó con una fotografía del actor con su célebre frase «Estos son mis principios. Si no le gusta tengo otros». Precisamente, algunos de sus seguidores aprovechaban tal alusión para achacarle que entre sus principios no estuviera el pacto con C’s.
El número dos del partido, el diputado Carlos Martínez Gorriarán, en declaraciones a este diario, calificó de «sorprendente» la propuesta y recordó la existencia de una resolución, aprobada con el 98% de apoyo en el último congreso, que obliga a UPyD a presentarse con las mismas siglas (las suyas) y el mismo mensaje en todo el país. «Sosa Wagner también la votó a favor», aseguró el dirigente, quien añadió que tampoco ha escuchado antes al eurodiputado hacer este análisis. En todo caso, cree que es complicado que prospere su idea: «El no de UPyD a las sopas de letras es un mandato que sólo otro congreso o uno extraordinario podría cambiar».
Y, además, admitió, en estos momentos, a pesar del cambio en el mapa de partidos que han supuesto las europeas, no existe ninguna predisposición en la cúpula de UPyD a un acuerdo con C’s. Son muy conscientes, asegura, de lo que se ha sucedido en los últimos meses. «Lo hemos analizado y es cierto que UPyD tiene que hacer algo, pero no pasa por una coalición electoral», aseguró.
En cambio, Sosa Wagner, en conversación con este periódico, reiteró que es un tema «que hay que tratar». «Es fundamental que se suscite el debate», reiteró. El eurodiputado sostiene, en alusión al citado congreso, que las circunstancias «son cambiantes» y que, por mucho que lo rechace la dirección, la idea no va a morir. «Me siento al lado de Javier Nart (eurodiputado de C’s) en Bruselas, votamos muchas cosas juntos y formamos parte del mismo grupo». Por ello, insiste, la idea seguirá planteándose: «No ha hecho más que empezar. Como decía Voltaire, las ideas nuevas que se expresan de manera valiente normalmente encuentran resistencia desde la cuna, pero acaban imponiéndose».
También justificó que no haya defendido antes esta posición en el partido por no formar parte de la dirección. Pero no descarta hacerlo. Sobre sus referencias a «prácticas autoritarias» o «sectarismo» en UPyD, dice que se refería a lo que pasa en algunas autonomías.
EL MUNDO – 20/08/14