EL CORREO, 10/11/11
El colectivo, crítico con el giro «conservador» de la Iglesia, advierte que el perdón «no excluye la acción de la Justicia»
El foro de curas de Bizkaia, alumbrado en corrientes progresistas del clero con el apoyo de laicos y seglares, advierte de que el cese definitivo de ETA no implica la consecución de la paz. Este colectivo, que se gestó en respuesta al giro «neoconservador» que dice detectar en la Iglesia vasca, considera que la búsqueda de la «convivencia reconciliada y pacífica» será «larga y laboriosa». Para esta tarea pendiente, pilar del «edificio sólido» de la pacificación, emplaza a quienes han causado tanto dolor a que «pidan perdón a sus víctimas». «El perdón no olvida ni, mucho menos, excluye la acción de la Justicia, pero hace a ésta más humana», subraya en un manifiesto difundido ayer.
El denominado foro de curas de Bizkaia se constituyó como una especie de grupo de presión tras el ascenso al obispado de Bilbao de Mario Iceta, hace ahora un año. Como colectivo, ha reivindicado una participación más activa de la Iglesia vizcaína en la designación de sus responsables para evitar «imposiciones». Asimismo, ha denunciado la irrupción de «una ola restauracionista», en una «involución» que se alejaría de las orientaciones del Concilio Vaticano II.
El colectivo difundió ayer un comunicado para participar de «la alegría mayoritariamente sentida» por el cese definitivo de la actividad armada anunciado por ETA el pasado 20 de octubre. Se trata de su primera opinión como foro en el nuevo escenario abierto por el final del terrorismo, en una intervención que coincide con el primer aniversario de Iceta al frente de la diócesis. Aunque una parte del clero mantiene sus recelos, el obispo de Bilbao ha salvado este tiempo sin una descalificación frontal a su gobierno. De hecho, no hay ninguna alusión al papel del nuevo prelado vasco en la gestión de la desaparición de la violencia ni al exprelado de Bilbao Juan Mari Uriarte, más implicado en el proceso.
Los curas que apoyan el manifiesto avisan que el cese de ETA «no debe confundirse con el logro de la paz». Sobre el relato pendiente de elaborar, abogan por un «diagnóstico basado en el diálogo sereno y la verdad, y no en ideologías».
EL CORREO, 10/11/11