EL CORREO, 9/8/12
Kemen Uranga residía desde hace años en la capital británica, donde trabajaba como gestor de un almacén y vivía con una mujer boliviana
El supuesto colaborador de ETA Kemen Uranga Artola fue detenido en la mañana de ayer en el barrio de Tufnell Park de Londres por agentes de Scotland Yard en el marco de una operación desarrollada con el Cuerpo Nacional de Policía. Su arresto se produjo como consecuencia de una orden europea de detención dictada por la Audiencia Nacional, que le acusa de colaborar con el ‘comando Bizkaia’ de ETA al haber facilitado un piso franco a los miembros del ‘talde’ en 2000.
El presunto colaborador de ETA, de 43 años y natural de Ondarroa, se encontraba huido desde la desarticulación del comando al que supuestamente había prestado apoyo para cometer atentados. Según la investigación policial, Uranga era concejal de Euskal Herritarrok en Ondarroa cuando comenzó a colaborar con el talde formado por los ‘liberados’ -terroristas fichados a sueldo de la banda- Asier Carrera e Igor Martínez de Osaba. Al parecer, en octubre de 2000, Uranga alojó a los etarras en su domicilio de Basauri durante dos días. Después, a petición de los terroristas, alquiló otra casa en la calle Solokoetxe, en Bilbao. Cuando los dos ‘liberados’ fueron detenidos, Uranga huyó del país. En diciembre de 2001 fue incluido en la lista de terroristas de la Unión Europea y, un año después, fue uno de los primeros supuestos etarras en entrar en la ‘lista negra’ del Gobierno de Estados Unidos.
Uranga, alias ‘Kurtz’, también fue relacionado en su día con el asesinato del juez José María Lidón en 2001, en el marco de una investigación que incluyó al exjefe militar de la banda, Garikoitz Aspiazu, ‘Txeroki’, y a la supuesta colaboradora Cristina Goirizelaia. Un testigo le identificó como uno de los autores del asesinato del magistrado, pero no pudo probarse su implicación, explicaron fuentes de la lucha antiterrorista.
Uranga, que fue detenido cuando entraba en el Café de la Paix de Fortress Road, residía desde hace años en la capital británica con documentación falsa. El supuesto colaborador, que fue profesor de Filosofía en Bilbao, trabajaba en Londres como gestor en el almacén de una compañía farmacéutica. Uranga, que recibía un salario bruto anual de unos 20.000 euros, vivía con una mujer boliviana y con el hijo de ésta en Raveley Street. Según un documento intervenido a Mikel ‘Antza’ en 2004 -hecho público ayer por Vasco Press-, se hacía referencia a que el sospechoso habría quedado desvinculado de la banda desde que huyó en el año 2000 y se apuntaba que desde entonces ya se encontraba oculto en Inglaterra.
Arresto sorpresivo
Tras comparecer ante un tribunal de la capital británica, fue conducido a la cárcel de máxima seguridad de Belmarsh. La detención sorprendió a las autoridades españolas porque Scotland Yard suele demorarse unas semanas en la vigilancia y arresto de supuestos miembros de ETA. En este caso, se ejecutó días después de recibir la información del Ministerio del Interior. En el juzgado de Westminster, Uranga confirmó que tratará de rebatir en los tribunales británicos la demanda de España. Se celebrará una nueva vista el día 15.
La defensa de Uranga, que ayer no pidió la libertad provisional, adelantó que ha detectado posibles defectos de forma en la tramitación de la orden europea. Cree que el paso del tiempo ha podido anular la vigencia de la orden y citó el precedente de Garikoitz Ibarluzea, el único caso de ETA fallado en Londres en favor del acusado, por incompatibilidad de los cargos en la orden con aquellos a los que se enfrentaría en España. Con Uranga, son ya cuatro los presuntos miembros de la banda capturados en el Reino Unido en lo que va de año.
EL CORREO, 9/8/12