ABC 06/07/13
· Reclusos arrepentidos acusan al «brazo político» de bloquear el acercamiento.
El mensaje de la Vía Nanclares
Crítica a la Izquierda Abertzale
«¿Qué sentido tiene acudir a un acto de recuerdo a unas víctimas de ETA si son incapaces de decir a sus familiares que lo sienten? ¿Cómo se puede seguir sin asumir que lo que hicimos con Miguel Ángel Blanco fue una barbaridad tan grande como la de Lasa y Zabala?»
Recado a Otegi
El portavoz batasuno, también en prisión, emplazó a Sortu a «dar nuevos pasos». Urrusolo y Caride se preguntan en la misiva por qué no los da él, en la medida que puede, para desbloquear el tema de la situación de los presos etarras.
· Crítica elocuente «Su actitud impide que muchos presos estén ya en sus casas (…) Están impidiendo el final de ETA»
Los presos arrepentidos de ETA Joseba Urrusolo Sistiaga y Rafael Caride Simón denunciaron ayer el bloqueo de la «izquierda abertzale» que con su posición de máximos («paz por amnistía») está impidiendo que el resto de reclusos de la banda apueste por el camino de la reinserción y, en consecuencia, pueda verse favorecido con medidas como el acercamiento, según lo dispuesto en la ley.
En una carta publicada por «Deia» titulada «¿Muros populares o ayudar a que los presos vuelvan a casa?», los dos reclusos críticos de la denominada «Vía Nanclares» señalan que los dirigentes de la «izquierda abertzale» siguen optando por «escenificar» la «solidaridad» que un sector de la sociedad vasca «expresa respecto a los presos», para rentabilizarlo según sus intereses propios, no de los reclusos.
Censuran que «para que los presos vuelvan a casa no se ha hecho absolutamente nada», más que «dejar pasar el tiempo» y llegan a pedir la implicación del encarcelado exlíder de Batasuna Arnaldo Otegi, para que dé «nuevos pasos» que desactiven su situación. Según su visión, Sortu-Bildu, lejos de contribuir a ello, «se han plegado ante los planteamientos del sector que se empecinó en seguir con la lucha armada hasta que no pudieron más». Y apuntan directamente al grupo de «comisarios políticos» que desempeñan las labores de defensa de los etarras, como la abogada Arantza Zulueta.
«La actitud de este sector está impidiendo que muchos presos y refugiados estén ya en sus casas. Están impidiendo que el final de ETA, que ellos mismos gestionaron de la peor manera, pueda afrontarse de una manera más sensata», añaden. Se muestran partidarios también de afrontar un «suelo ético compartido». «¿Qué sentido tiene acudir a un acto en recuerdo a unas víctimas de ETA si son incapaces de decir a sus familiares que lo sienten, que semejante barbaridad no debía haber ocurrido? ¿Cómo se puede seguir sin asumir que lo que hicimos con Miguel Ángel Blanco fue una barbaridad tan grande como la que hicieron con Lasa y Zabala?», inquieren.
Bildu: «Prioridad política»
El parlamentario de EH Bildu Julen Arzuaga evitó polemizar con «unos presos» en concreto, en alusión al colectivo crítico que conforman los reclusos de Nanclares, y zanjó el asunto precisando que el conjunto de los reclusos de ETA es una «prioridad política» y una «prioridad humana» para la coalición radical.
ABC 06/07/13