EL MUNDO 28/09/13
· El líder de Unió ve imposible pactar la independencia con el Estado.
La fractura entre Convergència y Unió, cuando se cumplen 25 años de la federación, es cada vez más notoria. Los esfuerzos de los líderes de ambas formaciones por sofocar cualquier desavenencia y transmitir un cierto clima de estabilidad en la formación son estériles. Hace meses que mantienen un fuego cruzado constante, con la independencia de Cataluña como telón de fondo. Tanto es así que ayer el líder de Unió Democràtica de Catalunya (UDC), Josep Antoni Duran Lleida, no rechazó que la federación pueda tener los días contados: «No me planteo la ruptura con CDC pero los hechos pueden llegar a situaciones que uno no desea».
Durante una entrevista concedida a la emisora catalana RAC1, Duran manifestó su voluntad de evitar «polemizar» con el presidente de la Generalitat, Artur Mas, que en el Debate de Política General del pasado jueves, receló de «terceras vías» como las que propugnan el PSC o el propio Duran. Pero sí advirtió de que no ve posible pactar con el Estado la independencia de Cataluña.
De hecho, el líder de Unió empuñó el programa electoral de la federación para retomar la defensa de su tercera vía. Recordó a sus socios de partido que el compromiso que suscribieron no era la independencia, «sino un Estado propio» para Cataluña, que puede tener cabida «dentro de un Estado confederal español», y que ambas formaciones abogaban entonces por convocar una consulta que contara con el beneplácito de Madrid.
Hace meses que Duran trata de poner freno a la deriva independentista de Convergència. Sostiene que en el proceso hay «mucha improvisación» y que no puede sumarse a la defensa de la independencia de la Comunidad porque «implicaría dejar al pairo a Cataluña durante muchos años».
Poco después de denunciar públicamente que en los últimos tiempos se ha sentido censurado –«aquí no se puede hablar con libertad, hay una cierta caverna mediática», lamentó– llegaron los envites de su socio de federación. Vía Twitter, el secretario de Organización de CDC, Josep Rull, replicó a Duran: «Estado propio significa Estado independiente». Cuando los periodistas le trasladaron en directo al democristiano la actividad de Rull en las redes sociales, Duran no escondió su enfado: «Yo no le respondería a un compañero en Twitter».
En otros tuits, Rull defendió una vez más que la pregunta que se formule en una eventual consulta sobre el Estado propio incluirá tres respuestas. «¿Tenemos que negociar la pregunta? Evidentemente. ¿Tiene que tener un amplio consenso? Sí. ¿CDC tiene un criterio propio para negociar? Sí: Una pregunta, tres respuestas», publicó. El democristiano le respondió en las ondas que realizar una pregunta sólo contribuye a alimentar el ganado de ERC y apostó, una vez más, por celebrar una consulta que recoja una opción que, a su juicio, está muy presente en la sociedad catalana, la de aquellos que «no quieren la secesión ni la sumisión».
EL MUNDO 28/09/13