EL CORREO 23/03/13
· ras la polémica sobre el carácter «político» de los atentados de ETA, la portavoz de la coalición cedió el papel estelar de la sesión a Julen Arzuaga
Laura Mintegi sólo apareció ayer en el tramo final del pleno monográfico sobre la resolución del conflicto vasco. A pesar de que la sesión especial había sido convocada a petición de EH Bildu, la portavoz de la coalición independentista tomó la palabra ya por la tarde, cuando los partidos tuvieron que presentar sus propuestas de resolución. Junto a las diez de EH Bildu, se votaron otras nueve de UPyD y una conjunta del PNV, PSE y PP.
Mintegi, que apenas una semana antes había desatado la polémica –y también una investigación del fiscal superior– por calificar de «políticos» los asesinatos de ETA, defendió las de su grupo, huyendo del choque directo con el resto de fuerzas. Pidió al resto de partidos que el «miedo escénico» por «llegar a acuerdos» no les «paralice» y abogó porque «todos» los partidos se acerquen «al que era el enemigo político».
Portavoces de EH Bildu aseguraron a EL CORREO que el reparto de papeles entre Arzuaga y Mintegi estaba «previsto» desde hace semanas, prácticamente desde el mismo momento en que se solicitó la convocatoria del pleno. Quisieron así desvincular el pequeño papel de la ‘número uno’ del grupo en la sesión de ayer del incidente de la semana pasada. Aunque sí reconocieron que optaron por esta fórmula para evitar que Mintegi participara en la parte más «áspera» del debate. Las mismas fuentes recordaban, en este sentido, que Arzuaga lleva años vinculado con la defensa de los derechos humanos y es un experto en los temas relacionados con las torturas a personas detenidas.
En ambientes políticos se ha extendido, sin embargo, en las últimas semanas la teoría de que el discurso de Mintegi está provocando ciertas fricciones con el recién nombrado presidente de Sortu, Hasier Arraiz. Una situación que la izquierda abertzale niega.
La intervención de ayer por la tarde de la portavoz de EH Bildu estuvo pensada, en todo caso, en positivo, aunque no exenta de cierta voluntad de hacer aflorar las contradicciones en el PNV. De las diez propuestas de resolución que la coalición llevó a votación, la mitad estaban basadas en declaraciones anteriores respaldadas por los jeltzales. Se trataba de alusiones a textos acordados en las conversaciones de Loyola, a los acuerdos del Pacto de Estella, la Declaración de Aiete, a documentos de la ONU sobre presos, a las conclusiones del Foro Social que la pasada semana convocaron Lokarri y Bake Bidea y al epígrafe 10 del Pacto de Ajuria Enea. De los diez puntos, tres salieron adelante con los votos de EH Bildu y el PNV.
Algo parecido le pasó a UPyD. De sus nueve propuestas, dos salieron adelante, bien por los votos del PSE y PP, bien porque también se sumó a esas dos fuerzas el PNV.
EL CORREO 23/03/13