IGNACIO CAMACHO – ABC – 23/06/16
· «No vamos a elegir entre el partido y España. Para nosotros, salvar al país significa salvar primero al PSOE…»
«Pase lo que pase el domingo, el Gobierno de este país lo vamos a decidir los socialistas. De algo tiene que servir haber sido el partido que más ha vertebrado España en esta democracia». El interlocutor es, obviamente, un militante significado del PSOE, con peso en la nomenclatura, sanchista ma non troppo: «Yo soy socialista, lo era antes de Sánchez y lo seguiré siendo después. Pero es el líder que tenemos ahora y por ende el candidato, nos guste o no. Te recuerdo que no se presentó nadie más». Lleva bastantes años en la política y nunca, ni siquiera tras el descalabro de Almunia, había sentido tan cerca el abismo.
«Lo tenemos crudo, sí. Vamos a ver si queda todavía algo de ese músculo social histórico de la organización. Yo aún confío en el arreón de última hora, en ese tirón que se produce cuando este partido se pone de verdad en marcha. Pablo Iglesias nos minusvalora. Ha diseñado muy bien el asalto, nos tiene contra las cuerdas, pero nosotros no somos IU. Ahora mismo en el PSOE y en sus simpatizantes hay verdadera animadversión hacia Podemos. Porque están jugando sucio y en parte por el viejo resabio anticomunista que hay en el socialismo. No le van a salir las cosas tan lineales como piensa. Al que se nos quiera comer se le va a indigestar el bocado.
»¿Qué haremos si nos adelantan? Primero abrir una reflexión, cuyo resultado dependerá mucho de las dimensiones del fracaso. Salvo un batacazo descomunal, y creo que no lo va a haber, Pedro intentará resistir al menos a corto plazo. Veremos si Susana es capaz de ganar en Andalucía. En el peor de los casos puede salir una gestora con alguien de consenso; no sé: Patxi, Javi Fernández, Guillermo… No habrá una decisión a la ligera. Tampoco respecto a la investidura. Que se presente Rajoy si quiere ir ganando tiempo….
»La primera apuesta de Sánchez es quedar segundo y presentarse a la Presidencia, trasladando toda la presión a Iglesias. Si eso no ocurre, el partido se va a dividir en el debate. Algunos postularán la abstención, siempre con la cabeza de Rajoy por delante, y otros son partidarios de pactar con Podemos… pero sin Iglesias. No lo vamos a hacer presidente, si conozco algo a mi gente. Lo único que no puede ocurrir es que se divida el voto del grupo parlamentario, eso sería la catástrofe. Piensa en una cosa: en realidad, Pablo no quiere la Presidencia ahora. Quiere que se la demos a la derecha, liderar él la oposición y ganar las próximas elecciones antes de dos años. ¿Qué tendríamos que hacer nosotros? Pues, por lógica, lo que menos convenga al adversario, ¿no?
»Pero tienes que entender algo. Ser socialista es una fe civil. Estamos en este partido convencidos de que sus propuestas son lo que más le conviene a España. Por tanto, no vamos a elegir entre el partido y España. Eso es un sofisma: para mí, salvar al país significa salvar primero al PSOE… ¿Estamos o no estamos?».
IGNACIO CAMACHO – ABC – 23/06/16