ABC – 30/12/14
· El fracaso de otra votación para elegir presidente obliga a convocar elecciones el 25 enero. El «premier» Samarás avisa a los populistas del riesgo de enfrentarse a la UE.
· Twitter de Pablo Iglesias: «Vamos Alexis!! Vamos @syriza_gr !!», escribió ayer en su cuenta de Twitter Pablo Iglesias, en un mensaje en el que vaticinaba que Grecia abrirá en 2015 «el año del cambio en España y en Europa» .
El Parlamento griego no logró ayer el consenso suficiente para elegir en tercer intento al presidente de la república, y el primer ministro, el conservador Andonis Samarás, se vio en la obligación de anunciar elecciones generales anticipadas el próximo 25 de enero. El Gobierno de coalición griego fracasó en su intento de evitar esta convocatoria y ganar unos meses clave de tranquilidad para negociar el final del rescate del país.
No ha sido una sorpresa.
Desde hace varias semanas existe una fiebre preelectoral en la sede de todos los partidos griegos, comenzando por la Coalición de la Iquierda Radical, Syriza por sus iniciales griegas. Los radicales, liderados por Alexis Tsípras (un excomunista de 40 años), han conseguido elecciones anticipadas y figurar como primer partido en intención de voto en todos los sondeos. Ya consiguieron una aplastante victoria en las elecciones europeas del pasado mayo, tras alcanzar el 26,58% de los votos frente a los conservadores, que quedaron en segunda posición con el 23%.
La elección interna de ayer en el Parlamento demostró también que no existe voluntad de consenso entre los partidos griegos. Samarás ofreció la posibilidad de crear una comisión multipartidista nacional para tratar el difícil tema de la deuda y la reforma constitucional pendiente, pero su propuesta fue rechazada.
Con aspecto sombrío tras la votación en el Parlamento, el primer ministro declaró a los medios extranjeros que «es muy lamentable que tengamos una oposición que juntó sus votos con los de Amanecer Dorado (el partido neonazi) para forzar elecciones generales cuando la gran mayoría de los griegos no las quiere». Samarás advirtió que «quienes han provocado estas elecciones son responsables de lo que ocurrirá en el futuro».
En cambio, el líder de Syriza no ocultó su entusiasmo por la convocatoria de comicios, para los que según los sondeos el partido populista de la izquierda parte como favorito. Alexis Tsípras, con una gran sonrisa, declaró al abandonar el Parlamento a una prensa expectante: «Sean optimistas, la austeridad terminará pronto».
¿Qué promete Syriza a los electores griegos? De entrada renegociar la deuda griega, en unos términos que los organismos acreedores consideran inaceptables. Luego, cambiar algunas de las duras reformas necesarias en el sector público que se han llevado a cabo hasta la fecha. Syriza quiere volver a nacionalizar empresas privatizadas y crear unos 200.000 puestos estatales.
También anuncia generosas prestaciones sociales «a los verdaderamente necesitados». Políticas caras en un país que en este momento no puede acudir a los mercados internacionales para sus necesidades y depende de la ayuda de sus acreedores; situación que se agravará aún más en caso de una victoria del partido de Tsípras.
Todo en suspenso
La ambigüedad de los radicales a la hora de explicar cómo conseguirá financiarse el Estado sin la ayuda de la «troika» (el FMI, el Banco Central Europeo y la Comisión Europea) es una de las razones por las que los sondeos muestran últimamente que la diferencia entre Syriza y la derecha de Nueva Democracia se ha reducido alrededor del 3,5%.
En este momento el programa de rescate de Grecia, que tendría que haber terminado a finales de año, ha sido prorrogado durante dos meses más, mientras termina una revisión final del programa por parte de la Unión Europea y del Fondo Monetario Internacional. Siguen pendientes reformas importantes y necesarias como la del sistema de pensiones. En principio se instalaría después una línea de crédito proveniente del Mecanismo de Estabilidad Europeo. Todo ello está ahora en el aire con la convocatoria de elecciones generales anticipadas.
El FMI anunció ayer tras conocerse la noticia, que el pago del siguiente tramo de ayuda no será entregado hasta la formación de un nuevo gobierno. La razón oficial subraya que por ahora el país no tiene necesidad inmediata de financiación.
ABC – 30/12/14