EL PAÍS, 8/11/11
López recalca que los afectados serán «un pilar fundamental» de la concordia
El Consejo Vasco de Víctimas del Terrorismo, un órgano consultivo que canaliza las relaciones entre las Administraciones y las asociaciones de afectados, mantuvo ayer la penúltima reunión de la ronda de contactos del lehendakari, Patxi López, ante el final de ETA, un final que exigió «con memoria y sin impunidad». Las víctimas recalcaron que el reconocimiento de su papel central en la reconstrucción de la convivencia pasa por perseguir cualquier acto que suponga una «revictimización», como los homenajes a etarras o cualquier equiparación con los victimarios. También instan a los poderes públicos a realizar «todos los esfuerzos necesarios» para aclarar los crímenes sin resolver. En resumen, pidieron una verdadera «justicia victimal a todos sus niveles», que sirva de cortafuegos contra las tentaciones de pasar página cuanto antes.
El comunicado leído al término de la reunión por el presidente del consejo, José Luis de la Cuesta, en una comparecencia en la que no admitió preguntas, recalca que la perspectiva de un futuro sin violencia es, sin duda, un «panorama nuevo que, junto a la constatación de la derrota de la estrategia terrorista y la victoria del Estado de Derecho, permite abrigar esperanzas» de que el final de la pesadilla está más cerca que nunca. Con todo, cualquier cese definitivo, abundó, «llega demasiado tarde» para quienes de forma directa o indirecta se han visto castigados por la violencia de ETA y su entorno, ya que toda pérdida es ya de por sí «irreparable».
El consejo recordó el documento firmado por la mayoría de las asociaciones y fundaciones de víctimas de España el 23 de noviembre pasado. Ese texto reclama que no haya «impunidad judicial o histórica» con los terroristas y rechaza una aplicación «laxa» de los beneficios penitenciarios para los presos etarras.
Alguno de los asistentes a la reunión apuntó a EL PAÍS que existe cierto malestar en algunas asociaciones de víctimas que forman parte del consejo. «Estoy pensando en poner mi cargo a disposición del consejo, no veo que sirva de mucho», indicó Javier Correa, representante de la Asociación de Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado. Con todo, se mostró muy satisfecho del trato recibido por parte del lehendakari, quien hizo hincapié en que los agentes tuvieron que aguantar en solitario mucho tiempo la violencia terrorista. También tomó nota de una propuesta suya para condecorar a los escoltas por su trabajo por la derrota de ETA.
López trasladó a los reunidos que las víctimas serán «un pilar fundamental» en el camino hacia la concordia como referente moral. Recalcó que Euskadi tiene «una deuda eterna» con ellas por su resistencia cívica y por haber pagado con su vida el precio de la libertad y la dignidad de los demás ciudadanos.
En paralelo, sigue la incógnita de si Euskadi celebrará y cómo el jueves el Día de la Memoria, después de que varias asociaciones y el PP mostraran su rechazo a un acto que incluya también a los afectados por abusos policiales.
EL PAÍS, 8/11/11