Del Blog de Santiago González
Después de la cumbre europea, el doctor Sánchez entró en La Moncloa entre los aplausos de los suyos. Él también se gustaba y por eso mismo se aplaudió. Si a lo largo de las 17 ediciones de ‘Aló, presidente’ no paró de jalearse como el mejor gestor de la pandemia, cómo no iba a gustarse después de la cumbre europea.
El acuerdo me parece excelente y a Sánchez ha debido de parecerle óptimo, como cualquier otro desenlace. A mí me parece un buen acuerdo para España, no tanto por el dinero que nos dan como por las condiciones que nos ponen.
Hace diez años el Gobierno de ZP acordó prestar a Grecia 9.794 millones de euros. Era la parte que correspondía a España del total de 110.000 millones acordada por la UE, de los cuales 80.000 millones correspondían a préstamos, con v de vuelta a un interés del 5%. Los otros 30.000 los aportaba el FMI. La vicepresidenta Elena Salgado, explicó para calmar los ánimos que la ayuda no tenía coste para España: “ese dinero nos va a ser devuelto y además con intereses”. Solidaridad, pero que no excluía la oportunidad de negocio.
¿Nosotros, frugales con Zapatero? Quién lo iba a decir.
Durante el fin de semana hemos visto una foto que subió a las redes el primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis, en la que se le ve junto a Giuseppe Conte, presidente del Consejo de Ministros de Italia; Angela Merkel, canciller alemana; Emmanuel Macron, presidente de la República francesa; António Costa, primer ministro portugués y Pedro Sánchez, presidente del Gobierno español. Todos ellos tienen ante sí papeles con los datos, es de suponer, que necesitan para la negociación. Todos menos el nuestro, que tiene su sitio limpio como una patena y lleva en la mano izquierda un bolígrafo, quizá con el mismo propósito que su vice segundo, que siempre juguetea con un boli entre las manos, ¡las manos del presidente! escribió en su día un emocionado Iván Redondo.
¿Para qué quiere un bolígrafo un hombre que no tiene papel y que además lo toma con la mano izquierda, siendo él diestro en la 2ª acepción del DRAE? Cabe pensar que prescinde de papeles para que nadie piense que le está copiando a António Costa. Ante la foto y con la lectura inevitablemente positiva que hará en su comparecencia (si lo hizo de su gestión de la pandemia, excuso decirles) cabe preguntarse: ¿qué habría podido conseguir este hombre si llega a sentarse entre sus pares con papeles?
Ni se sabe, aunque entre los del aplauso estaba su vicesegundo dispuesto a tragar lo que hiciese falta, y su novia, tan crítica con la Corona, gracias a los dicterios que él iba enseñando a todas sus parejas: Borbones a los tiburones; Felipe no serás Rey, que vendrán nuestros recortes y serán con guillotina y en este plan, pero yo me temo que este galán no las escoge por listas. No es que a uno le parezca ejemplar lo del emérito (a sus años) pero la ninistra debería interesarse más por la a empresa 360 Global Media de la que cobraba su galán por La Tuerka y Fort Apache y que interesa al Servicio Ejecutivo de la Comisión de Prevención del Blanqueo de Capitales (Sepblac). También podría interesarse más por el caso Dina que por el de Corinna. Son del mismo género pero está más a su nivel. Se ponga como se ponga no hay manera de confundirla con Doña Sofía.