Carlos Iturgaiz, LA RAZÓN, 10/1/12
Suelen decir en las democracias occidentales que el Gobierno entrante siempre tiene un plazo de cien días de cortesía. El pasado sábado los criminales de ETA ya demostraron que al Gobierno de Rajoy los terroristas le van a presionar desde el primer minuto, y me estoy refiriendo a la manifestación que organizaron en Bilbao con un objetivo claro: que los asesinos salgan de prisión y campen a sus anchas por las calles de este país.
Para algunos podría ser sorprendente ver como algunos partidos políticos, incluido el Lehendakari Patxi López, se suman con sus declaraciones a los planteamientos de los terroristas de esa manifestación, pero no tiene nada de sorprendente. Todo esto es un nuevo paso en la negociación que se entabló entre el Partido Socialista de Zapatero y ETA con mediadores internacionales por medio para dar oxígeno a las reivindicaciones de los terroristas.
Hoy los españoles nos encontramos con un escenario desolador y perverso en la lucha antiterrorista gracias a ese pacto bochornoso, ETA está en las instituciones democráticas de este país, es decir tenemos a la zorra en el gallinero. ETA no ha abandonado las armas, no ha desaparecido, no ha pedido perdón a las víctimas del terrorismo, ni las ha resarcido económicamente… Y desgraciadamente algunos se jactan de que ETA ha desaparecido y se ha terminado. Quiero dejar muy claro que ETA no desaparecerá mientras sigan ganando como hasta ahora, por eso los terroristas deben saber que su sitio no es la calle, sino pudrirse en las prisiones de este país pagando por los crímenes que han cometido. Hago mías las palabras del presidente del Gobierno a los proetarras en la sesión de su investidura: «No les debemos absolutamente nada». Pues eso.
Carlos Iturgaiz, LA RAZÓN, 10/1/12