EL CORREO 26/12/13
· Aunque admite que «ese riesgo siempre existe», Javier Zaragoza considera que provendría de un sector «muy minoritario».
El fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Javier Zaragoza, no cree que «tenga visos de verosimilitud» una escisión en el seno de ETA con el objeto de volver a la lucha armada y, pese a reconocer que «ese riesgo siempre existe», considera que en todo caso provendría de un sector «muy minoritario».
El máximo responsable del Ministerio Público en el tribunal encargado de juzgar los casos de terrorismo sostiene que el mundo etarra y su entorno «no es homogéneo, no existe una opinión unánime de si ETA debe desaparecer o no». Bajo su punto de vista, esto provoca que «la estrategia de finalizar con la actividad terrorista y proceder de forma progresiva a la disolución de la banda o la entrega de las armas» no tiene por qué ser «unánimemente compartida».
«Puede haber casos de presos históricos que han estado muchos años en la cárcel que sigan pensando que ETA no debe desaparecer, sino que debe continuar con la actividad violenta que ha desarrollado durante los últimos 50 años», precisa Zaragoza en una entrevista concedida a Efe.
El fiscal jefe entiende que, en todo caso, se trataría de «un sector muy minoritario» y que desde su departamento trabajan «para que eso no suceda, que no vuelvan a hacerse con las riendas de la organización, desarticularlos, detenerlos si llega el caso y evitar que se produzca una continuación de la actividad terrorista». «Tanto la acción policial como la judicial van a tener en cuenta esa circunstancia para tratar de evitar que volvamos al pasado», insiste.
Sobre la posibilidad de que en un futuro próximo la banda anuncie su disolución o la entrega de armas, Zaragoza advierte que realizar «juicios de previsibilidad sobre lo que va hacer ETA es muy difícil», ya que ambas cuestiones son «responsabilidad exclusiva» de la organización terrorista. «Lo único que puedo decir es que todos estamos trabajando al máximo para conseguir o para obligarle a que se disuelva de una vez, que la disolución sea un hecho, que entregue las armas, los explosivos, y para que se pongan a disposición de la Justicia las decenas y decenas de personas que en estos momentos tienen reclamaciones pendientes», añade Zaragoza.
En c uanto al futuro de la Audiencia Nacional en caso de disolverse ETA, señala que, si bien se ha producido ya un descenso de las investigaciones relacionadas con esta organización, «hay que recordar que existen otros fenómenos terroristas».
Otros terrorismos
Zaragoza destaca que en estos momentos se aprecia «una cierta curva de incremento» en el terrorismo de naturaleza «anarcoinsurrecionalista», localizado en determinadas zonas. Además, persiste la amenaza del «terrorismo yihadista radical o internacional que nos mantiene en una situación de tensión permanente o el vinculado con el independentismo radical».
Al margen del terrorismo, el fiscal jefe recuerda que la Audiencia Nacional tiene otras competencias «históricas que desempeña y desempeñará y que habrá que revisar en su momento, sobre todo, en relación con la criminalidad socioeconómica vinculada con la corrupción».