DIARIO VASCO, 27/3/12
López afirma que un nuevo gobierno nacionalista sería «la vuelta a la bronca permanente»
Patxi López cree que lo primero que deben hacer los presos de ETA es «asumir la responsabilidad de lo ocurrido», pero que la petición de perdón «es una consideración…» «Lo que hay que pedir es que asuman la responsabilidad con su pasado», insistió. El lehendakari defendió que «estas cosas no se tienen que hacer bajo los focos, sino con discreción». «Si queremos que de verdad desaparezca ETA y Euskadi sea un país en paz y convivencia no podemos estar permanentemente bajo los focos en cada pasito que damos», apuntó después de insistir en la «necesidad» de llevar a cabo otro tipo de política penitenciaria.
El lehendakari cree que la petición de perdón a los reclusos es una «consideración»
La respuesta de la AVT no se hizo esperar, su presidenta Ángeles Pedraza contestó a López que «a él no le importará nada el perdón» de los presos etarras «porque no le han matado a nadie ni le han herido», pero que a las víctimas que han pasado por eso sí.
En su primera intervención pública tras finalizar el viaje oficial a India, el lehendakari pidió, en un desayuno informativo organizado por Europa Press en Madrid, que las víctimas del terrorismo no se erijan como «censoras de ciertas políticas» y apostó por acercar a presos «que empiezan a hacer su recorrido en la inserción democrática».
A juicio del lehendakari, los demócratas han demostrado sobradamente que han «derrotado a ETA sin ceder un milímetro», por lo que planteó hacer «las cosas con el Gobierno de España con la discreción que nos permita avanzar. El objetivo es compartido con todos».
Preguntado por su futuro al mando del Ejecutivo vasco, López aseguró que se siente «con toda la fuerza del mundo» para seguir al frente de la Lehendakaritza y que no prevé ninguna complicación excesiva en el último tramo de la legislatura a pesar de las discrepancias del PP con su gestión al frente del Gobierno. Advirtió de que el regreso a Euskadi de un gobierno nacionalista supondría «la vuelta al pasado de la confrontación y la bronca permanente» de los gobiernos de Juan José Ibarretxe, donde «el clima de crispación consumía todas nuestras energías».
Izquierda abertzale
El lehendakari defendió los tres años de Ejecutivo socialista fundamentalmente porque han supuesto «un cambio de agenda» en la política vasca y que las prioridades del Ejecutivo vasco estén «donde están las de la ciudadanía: en la economía, el empleo, la educación, la sanidad». Resaltó que los años de su gobierno han sido los del fin del terrorismo pero también los del inicio de la recuperación de la libertad ciudadana. «Comenzamos la legislatura con ETA y la terminamos sin actividades terroristas. Solo por esto ha merecido la pena estar en el Gobierno Vasco», apuntó.
López explicó que el ascenso electoral de la izquierda abertzale se ha debido a que «mucha gente» en el País Vasco entendió que este voto «podría ser el que avanzara más rápidamente en la desaparición de la violencia y en la consolidación de la paz», personas no vinculadas hasta entonces a este mundo. A partir de ese momento, argumentó, este colectivo y el PNV mantienen una contienda «para ver quién es el hegemónico en el mundo nacionalista y compiten en ese debate soberanista», situación con la que se hinche «un globo» que desplaza a otras fuerzas políticas. Avisó, sin embargo, de que el PSE se va a centrar en «desinflarlo», porque las «confrontaciones identitarias» son perjudiciales para el País Vasco.
De cara a las próximas elecciones autonómicas, se mostró convencido de que la marca Sortu, recurrida en el Tribunal Constitucional, podrá presentar candidatura. A su juicio, se trata de «dar visos de realidad a lo que es real, no más». El lehendakari reconoció que le resultaría «muy difícil» gobernar con ellos porque les separan «abismos». El primero, el recorrido pendiente de la izquierda abertzale hasta «integrarse plenamente en los principios y valores éticos». El segundo, la gestión «desastrosa» que Bildu está realizando en las instituciones donde gobierna, como la Diputación de Gipuzkoa o el Ayuntamiento de San Sebastián. «Uno piensa a veces que es la no gestión de los problemas», reflexionó.
Sobre las posibilidades de una moción de censura que retirase a Bildu del Gobierno de Gipuzkoa, el lehendakari aludió a la responsabilidad en el PNV. Recordó que el PSE, desde el primer minuto se puso a disposición del PNV y PP «para evitar que gobernara quien no sabe gobernar y no merecía gobernar. El primer paso le corresponde ahora a quien frustró esa posibilidad», concluyó.
La polémica ponencia sobre convivencia que se votará este viernes en Parlamento Vasco también ocupó parte de su intervención. Deseó que «de aquí al jueves» se llegue a un acuerdo para constituir una ponencia sobre pacificación y convivencia, en la que aseguró que no se dará «protagonismo a Batasuna». La intención, apuntó, no es tramitar la agenda política de Batasuna, ni dar protagonismo a Batasuna, ni para que pasen por allí como ha acusado el PP».
DIARIO VASCO, 27/3/12