EL MUNDO 05/08/13
La Policía identifica a Antón García Matos, al que estuvo a punto de detener en enero
Estuvo a punto de caer. El pasado mes de enero, en concreto el día 7, estuvo muy cerca de ser capturado. Las Fuerzas de Seguridad del Estado casi lo tuvieron entre sus dedos. Pero, finalmente, no acudió a la cita vigilada en la que un miembro de Resistencia Galega recibió material explosivo.
Ese terrorista sí fue detenido. Pero en el operativo policial no se logró localizar y arrestar al que se considera el máximo responsable de la estructura terrorista asentada en Galicia que ha protagonizado ya incontables episodios de violencia con explosivos.
Antón García Matos se encuentra en busca y captura. El Ministerio del Interior no tiene dudas de que es el número uno de esta trama terrorista cuyos principales integrantes, al menos los más dinámicos, están en prisión pendientes de que la Audiencia Nacional dicte sentencia.
En los tres últimos años, las fuerzas de seguridad –en noviembre de 2011, en septiembre y octubre de 2012 y en enero de 2013– llevaron a cabo contundentes actuaciones contra la estructura ilegal y clandestina de Resistencia Galega. Los golpes se centraron en los grupos dedicados al abastecimiento de explosivos y a los comandos activos. Y en estas operaciones se trabajó sobre la hipótesis de que el propio García Matos apareciera en alguna de las entregas. Pero no fue así.
Se presume que, junto a él, Asunción Losada Camba, también huida, ocupa el máximo nivel de decisión de la banda. Es una de las piezas más codiciadas actualmente en la lucha contra el terrorismo.
Y es que la preocupación policial ha aumentado durante los últimos meses. No tanto porque Resistencia Galega haya ganado potencia criminal. No. Más bien porque lo que se está demostrando es que está ganando simpatías de las formaciones políticas más radicales de la comunidad gallega. Este hecho perturba profundamente a las Fuerzas y Cuerpos de la Seguridad del Estado. Ante el inicio de juicio en la Audiencia Nacional contra algunos de los principales integrantes, los gestos de compadreo lanzados desde estos sectores han sido demasiado evidentes y han despertado las suspicacias de los especialistas antiterroristas, que aún recuerdan la importancia que tenía para la supervivencia de ETA contar con respaldos importantes desde el mundo político y social. Por eso lanzan las alertas.
El último atentado de Resistencia Galega se produjo el pasado 10 de abril, con la colocación de un artefacto explosivo en una sucursal bancaria (uno de sus objetivos favoritos) de la localidad pontevedresa de El Rosal.
Los analistas policiales consideran en sus informes internos que el actual jefe y número uno de Resistencia Galega, Antón García Matos, fue también dirigente y miembro del desarticulado Exército Guerrilleiro del Pobo Galego Ceibe. Además, fue fundador de la AMI (Asamblea da Mocidade Independentista). Los informes son contundentes: «Es el líder intelectual y operativo de todas las estructuras que conforman esta organización terrorista», según los documentos que obran en poder de este periódico.
Según esa información policial, durante los últimos años, y ante el fuerte incremento de las actividades criminales de este grupo, desde el Ministerio del Interior se puso en marcha un grupo especial en el Cuerpo Nacional de Policía para investigar y tratar de cortar de raíz esa nueva estructura terrorista.
Se puso en marcha una «sección especializada dentro de la Comisaría General de Información para impedir la implantación en Galicia de una organización terrorista, que mediante el ejercicio de la violencia, defendiese la lucha armada como método válido para la consecución de sus fines soberanistas e independentistas».
Y así, desde 2010 a 2013, las actuaciones policiales han sido determinantes para poner fin a los atentados llevadas a cabo por los comandos activos de esta nueva trama terrorista.
La última actuación tuvo lugar pasado mes de enero. Adrián Mosquera fue detenido en Ames (La Coruña). Se le incautaron tres potentes artefactos explosivos y se le imputó un delito de pertenencia a organización terrorista. La Policía le tildó de responsable del aparato militar de las estructuras de Resistencia Galega. De esta forma, el entramado perdió «al responsable de la estructura de comandos de la zona norte de Galicia», según consta en los documentos policiales.
Los últimos atentados
> 10 de marzo 2013. Artefacto explosivo en una sucursal bancaria de la entidad Novagalicia Banco, en la localidad de El Rosal (Pontevedra).
> 16 de agosto 2012. Bomba en las instalaciones de Telecomunicaciones en el Monte San Paio, en Vigo.
> 8 de junio 2012 . Explosión en la sede del PP en Ribadumia (Pontevedra).
> 7 de mayo de 2012 . Artefacto explosivo contra la sede del PP en Meis (Pontevedra).
> 12 de febrero de 2012 . Ataque con explosivos contra la oficina de empleo de la Consejería de Trabajo de La Coruña.
> 9 de enero de 2012. Bomba contra la sede de la Mutua Gallega en La Coruña.
> 9 de noviembre de 2011. Artefacto explosivo contra la sede del PSdeG en Negreira (Pontevedra).