LIBERTAD DIGITAL 13/07/17
CRISTINA LOSADA
· Estoy por hacer una petición en Change.org para que Pedro Sánchez le diga a Martin Schulz eso de que Baviera es «una nación sin Estado».
Después de poner como modelo para España el Estado plurinacional de Bolivia, los socialistas han pensado que era mejor quedarse en Europa para el asunto de los ejemplos. Ahora prefieren hablar de Bélgica y de Alemania. Cierto que lo había apuntado ya la vicesecretaria Adriana Lastra en la entrevista en la que expuso el referente boliviano. Porque ahí dijo también que Baviera es «un Estado libre asociado en (sic) Alemania». Esto recordaba peligrosamente al famoso Plan Ibarretxe, y sugería la pregunta de por qué el PSOE rechazó aquel proyecto para Euskadi, cuando el status que pedía es, según los socialistas, prácticamente el mismo que tiene Baviera en la respetada República Federal de Alemania. Por lo menos, en el nombre.
Ay, los nombres. Pero déjenme que cite antes a la presidenta del PSOE, Cristina Narbona. Presentaba las propuestas que van a hacer con el PSC para afrontar el desafío independentista en Cataluña. La idea, ya conocida, es una España federal, y la innovación, recientemente pergeñada, es que dentro de España puede haber, dijo Narbona, «naciones sin Estado, en referencia a las comunidades históricas, como ya ocurre en Baviera, dentro de Alemania, y la concepción de las partes que conforman Bélgica». Por si no quedaba claro, que no quedaba, Narbona explicó: «Baviera, sin ninguna duda, es una nación reconocida con la denominación de länder dentro del Estado alemán».
Así lo pusieron en las crónicas y así lo pongo yo, consciente de que länder se escribe en realidad Länder, con mayúscula, pero es el plural –por tanto, Baviera no es un Länder, sino un Land– y consciente, sobre todo, de esto: cada uno de los estados federados de Alemania recibe el nombre de Land. Todos. Alemania tiene 16 Länder como España tiene 17 comunidades autónomas. Siguiendo el razonamiento de Narbona, todos los estados federados de Alemania son naciones, porque todos están reconocidos con la denominación de Land. No sólo Baviera. En fin. A mí me cuesta creer que Narbona no sepa que todos se llaman así. Es más, no lo creo. Esas declaraciones suyas deben de haber sufrido un lost in translation.
Donde seguro que hay un lost in translation (o un lost por no saber nada de historia alemana) es en la otra denominación que lleva Baviera. Se llama Freistaat, «estado libre». Pero no se llama así porque Baviera vaya a su bola, libre de asociarse a Alemania o a quien le dé la gana. Tampoco porque sea jurídicamente distinta al resto de estados federados alemanes: el federalismo alemán no anda con asimetrías. El nombre de Freistaat lo adoptó Baviera en el contexto de la revolución alemana de 1918-1919, cuando se proclamó libre de monarquía, como hicieron inmediatamente después otros territorios y toda Alemania, al establecerse la República de Weimar. Se mantiene por esa razón histórica y lo llevan también otros Länder. En la República de Weimar, las entidades territoriales alemanas se llamaron o estado libre (libre del Reich) o Volksstaat. La denominación tiene raíces en el pasado medieval alemán, en las llamadas ciudades libres, nombre que algunas urbes siguen conservando. No se olvide que Alemania se mantuvo fragmentada en Estados independientes (principados, reinos) hasta muy tarde. Se unificó avanzado el siglo XIX, bajo el impulso de Prusia y, en concreto, de Bismarck.
Yo estoy por hacer una petición en Change.org para que Pedro Sánchez le diga a Martin Schulz, el candidato de los socialdemócratas alemanes en las próximas elecciones, eso de que Baviera es «una nación sin Estado». Imagino a Schulz diciendo: «Wieso das? [¿cómo es eso?], pero ¿qué es entonces Alemania?». Porque hasta donde Schulz y todos los demás sabemos, Alemania es el Estado del que forma parte Baviera, igual que España es el Estado del que forman parte las comunidades autónomas. Háganse un favor. Dejen de decir que Baviera es una nación sin Estado, porque tiene un Estado: el alemán.
Hasta ahora, la búsqueda de Estados y naciones por el mundo adelante en los que proyectar los deseos separatistas era un hábito de los nacionalistas catalanes, que lo practicaban con singular falta de respeto a la verdad. No vayan a caer en el mismo vicio los socialistas en su apresurada busca de modelos. Pero mi petición más urgente al PSOE es que dejen de liarse, y de liarla, con los nombres de la cosa. Y, si van a poner de ejemplo a Baviera, llamen antes a los del SPD. Porque supongo que no querrán como interlocutor a la CSU, la Unión Social Cristiana, que son los conservadores que mandan en el estado libre de la nación sin Estado asociado al Estado alemán, que así es como ven Baviera los socialistas españoles. Verrückt!