ABC 15/09/16
· Un sondeo del Gobierno vasco confirma el desplome del PSE a la mitad
Hasta el momento todas las encuestas coinciden, escaño arriba o abajo, en el mismo escenario electoral en el País Vasco. El PNV ganará las elecciones autonómicas vascas con un amplio margen el próximo 25 de septiembre. Bildu y Podemos se jugarán la segunda plaza. El PSE se derrumba a la mitad. El PP resiste con dificultad en su maltrecha situación y Ciudadanos no logra entrar en la Cámara vasca.
Así lo pronostica también el Sociómetro, un sondeo realizado por el Ejecutivo autonómico (2.576 entrevistas) entre el 1 y el 8 de septiembre. Como ya apuntaron el CIS y una encuesta de la televisión pública vasca ETB, se espera una victoria cómoda del PNV de Iñigo Urkullu, con 26 escaños, uno menos que ahora, lo que le permitirá gobernar, aunque en minoría. Ni su gestión en estos últimos cuatro años de crisis, ni la irrupción de Podemos, ni la inestabilidad política en España le pasan factura a los nacionalistas moderados, según la demoscopia. El partido de Sabino Arana, eso sí, busca apoyos para garantizarse un mandato estable en un Parlamento con 75 escaños y donde la mayoría absoluta se fija en 38. Es ahí donde PSE y PP –que protagonizaron el Gobierno del «cambio» entre 2009 y 2012– fijan sus magras expectativas de éxito.
Iglesias, a la baja
De lo que no hay duda es que la gran pugna en esta campaña electoral se libra entre Bildu y Podemos, que llegan muy igualados a las urnas. El CIS del pasado viernes dibujaba un empate técnico a 16 escaños, y una diferencia de poco más de un punto a favor de la vieja Batasuna. Sin embargo, el Sociómetro de ayer enfría las expectativas del partido de Pablo Iglesias, que, polémicas de la lujosa casa al margen, está acusando la inexperiencia de su candidata, Pili Zabala (el debate en euskera del martes en ETB le dejó en evidencia ante el resto, más experimentados, y hoy tendrán la reválida en castellano). Según el estudio de ayer, se ensancha la distancia a favor de Bildu, con 17 parlamentarios frente a los 21 actuales. Podemos se quedaría en 15, cinco escaños por cada provincia.
Los de Iglesias, que venían de ganar en las generales al PNV por más de 45.000 votos y que centran su estrategia de campaña en derribar a Urkullu (no hay mención a Bildu en los discursos de sus dirigentes), se deben conformar con el bronce. Es, en todo caso, un resultado notable para la formación morada, que se quedaría como segunda fuerza en Vizcaya y Álava, por detrás del PNV. En Guipúzcoa, fortín del nacionalismo, serían terceros.
PSE y PP, en mínimos
El Sociómetro vasco otorga nueve parlamentarios al PSE, que ahora contaba con 16, certificando el derrumbe que ya mostraron días atrás los sondeos del CIS y de ETB. Los socialistas insisten en que las encuestas «siempre» les «maltratan», con peores resultados de los que al final tienen en las urnas y aspiran a la remontada.
El PP conservaría 8 asientos de los 10 que obtuvo en 2012. Por su parte, Ciudadanos no conseguiría representación en el Parlamento vasco, aunque está a punto de hacerlo en Álava (tiene un 3,2 por ciento de apoyos).
De confirmarse, el resultado de los dos grandes partidos, PP y PSOE, sería muy pobre, particularmente en un momento en el que está por decidirse la formación del Gobierno de España. Alfonso Alonso, candidato del PP a lendakari, apeló precisamente a la estabilidad institucional para reclamar el voto a los populares. «El voto al PP es para desbloquear el Gobierno de España», aseguró Alonso ayer en un mitin en Vitoria junto a la secretaria general del partido, María Dolores de Cospedal.