EL PAIS – 03/09/16
· Ortuzar: “No vincularemos la posición en Madrid con la gobernabilidad de Euskadi a nuestra posición en Madrid”.
El PNV lleva ya semanas soportando la presión. Tanto el PP de Mariano Rajoy como elPSOE de Pedro Sánchez analizan las opciones de contar con los cinco escaños de los nacionalistas vascos en el Congreso las elecciones autonómicas del próximo día 25. Podrían ser una llave que desbloquee la investidura en el Congreso, más aún en el caso de que el PNV necesite en Euskadi al PSE o al PP para seguir gobernando.
El presidente de los nacionalistas vascos, Andoni Ortuzar, aseguró ayer en Radio Euskadi que descarta un cambio de cromos con el PP. “Nosotros no vamos a vincular la gobernabilidad de Euskadi a nuestra posición en Madrid, ni al revés”, dijo.
Sin embargo, lo que el PP o el PSOE necesitan en Madrid el PNV lo puede requerir en Vitoria después del 25-S. Las encuestas apuntan a que el partido de Ortuzar no va a obtener la mayoría absoluta en el Parlamento vasco y podría necesitar de los escaños de ambos partidos para garantizarse la estabilidad frente a quienes, desde posiciones de izquierdas, defienden el derecho a decidir. Ortuzar vio ese apoyo improbable pero dejó la puerta entreabierta: “Para que en la gobernabilidad de Euskadi tuviera algo que decir el PP tendría que suceder que EH Bildu y Podemos se juntasen. ¿Alguien piensa que estos dos partidos pueden hacer un frente anti-PNV? Yo creo que no”.
En cualquier caso, el PNV no quiere que la gobernabilidad de España se cuele en la campaña vasca. Un hecho que, como ya adelantó el candidato del PP vasco, Alfonso Alonso en una entrevista en EL PAÍS, es inevitable.
Las encuestas de intención de voto dejan un panorama totalmente abierto. El PNV ganaría con los 27 escaños que tiene en la actualidad. EH Bildu y Elkarrekin Podemos se disputarían el segundo puesto, con 16 escaños para los de Arnaldo Otegi (cinco menos que en la actualidad) y 15 para la candidatura encabezada por Pilar Zabala. Entre EH Bildu y Podemos no dispondrían de mayoría absoluta, pero superarían al PNV, al sumar 31 frente a los 27 del grupo de Urkullu en un Parlamento de 75. Al PNV no le queda más remedio que reforzarse.
El mayor batacazo se lo darían los socialistas. Los sondeos coinciden en que el partido que dirige Idoia Mendia caería de los 16 parlamentarios actuales a nueve —siete menos—, y eso complicaría también la mayoría absoluta para PNV y PSE. Entre ambos superarían a EH Bildu y Podemos, al sumar 36, pero se quedarían a dos de la mayoría absoluta.
El PP podría completar ese hueco que deja el descenso socialista. Las encuestas estiman que logrará siete escaños, tres menos que en 2012. A Ciudadanos le atribuyen el escaño que deja libre UPyD en Álava.
En este tablero de damas han cogido al PNV como objeto de juego”, reconoció ayer Ortuzar, tras asegurar que frente a otros como el PSOE, que ha vetado a Rajoy, ellos no han “entrado en vetos a personas”.
En un intento por alejarse de esa presión, Ortuzar pintó el escenario deseado para la Euskadi posterior al 25-S y diferenció los partidos que le podrían dar la estabilidad de los que servirán para labrar grandes acuerdos. Una especie de café para todos que posiblemente no va a convencer a nadie. Y menos cuando el PNV tiene,con el PSE un acuerdo amplio para gobernar en las tres Diputaciones vascas y en muchos Ayuntamientos, y un compromiso para aprobar los presupuestos de la comunidad autónoma que funciona desde 2013.
EL PAIS – 03/09/16