EL CORREO, 1/11/11
Erkoreka asegura que la aportación de la izquierda abertzale a la paz ha sido «más bien escasa» y destaca la importancia de jueces y policías contra ETA
El PNV insistió ayer en su convicción de que es posible dar pasos sin demora en política penitenciaria, para hacerla «más humanitaria» y por lo tanto «más acorde» con los tiempos que corren, tras el cese definitivo de la violencia de ETA. El candidato jeltzale por Bizkaia, Josu Erkoreka -que multiplicó ayer sus apariciones, primero en una entrevista en Radio Euskadi y, después, de precampaña en la feria agrícola del Último Lunes de Gernika- se mostró convencido, en ambas intervenciones, de que la actual «dureza» con los presos etarras, entendida como «complemento» de la política antiterrorista, ya no es necesaria por razones obvias.
«Ese componente adicional de dureza ya no tiene sentido y debe desaparecer», insistió el aspirante peneuvista, que recordó que el ordenamiento jurídico, sin necesidad de modificaciones, concede un «margen importante» e instrumentos «claros y útiles» para «humanizar» la situación de los reclusos. Erkoreka puntualizó que no se refería solamente al fin de la dispersión, sino también a la excarcelación de los presos con enfermedades graves o a medidas de indulto «muy individualizadas y concretas» en función de la trayectoria de cada recluso. Dejó claro, eso sí, que la sociedad no toleraría ahora medidas de gracia colectivas.
El PNV, sabedor de la feroz competencia que encontrará el próximo 20-N en la izquierda abertzale, ha hecho de las exigencias penitenciarias uno de los ejes principales de su discurso, que Erkoreka completó ayer minimizando el papel que la izquierda abertzale ha desempeñado en el final de ETA. Incluso, dijo esperar que «se prime» en las urnas a «quienes más y con más responsabilidad hemos trabajado para llegar al escenario actual», en referencia al PNV. Es más, consideró que, pese al gran «esfuerzo mediático» que la izquierda abertzale está haciendo para «capitalizar el fin de ETA», su contribución a la paz ha sido «más bien escasa». «Todos sabemos que si estamos en la situación en la que estamos es básicamente porque ETA quedó desarticulada prácticamente como consecuencia de la presión policial y judicial». Ciertamente, el PNV ha reconocido en los últimos tiempos la importancia de esas vías, pero también la apuesta por la política de la izquierda abertzale y su victoria frente a la ortodoxia etarra.
López, «sectario»
Sea como fuera, en puertas de las elecciones generales el PNV insiste en su papel en la historia reciente -centrado en la «construcción» desde las instituciones de una «economía próspera»- mientras otros «se dedicaban a poner ‘cócteles molotov’». Erkoreka también destacó que, a estas alturas, todos los partidos saben, incluida la izquierda abertzale, que ningún Gobierno abrirá ningún tipo de «negociación política» con ETA. «Hay un consenso unánime, la paz no va a tener ningún precio político», recalcó.
También replicó el candidato del PNV a la inquietud mostrada por el lehendakari Patxi López ante las pretensiones soberanistas de su partido. «Es todo un sarcasmo», manifestó Erkoreka, que el jefe del Ejecutivo vasco «se permita acusar a los demás de parcialidad, sectarismo y exclusión» cuando preside, dijo, «el Gobierno más sectario y excluyente que ha conocido la comunidad autónoma».
EL CORREO, 1/11/11