EL CORREO 14/09/13
· Urkullu considera que dar continuidad a las reuniones del foro tras el abandono del PSE sería «como construir Euskadi en base a trincheras».
El PNV no volverá a convocar ni a sentarse en la ponencia de paz hasta que el foro parlamentario cuente con el aval de un mayor consenso político. Lo que es lo mismo, hasta que PSE y PP –o por lo menos los socialistas– accedan a volver a sentarse a la mesa tras su abandono esta misma semana.
El grupo de trabajo entró ayer en vía muerta. «Un nuevo escenario», que vino a describir el portavoz jeltzale en la ponencia, Joseba Egibar. Si ya nació cojo, dadas las ausencias del PP y de UPyD, la salida de la formación que lidera Patxi López por la «involución» de EH Bildu dejó al foro herido de gravedad. El PNV y la coalición abertzale se reunieron ayer, en la que será por ahora su último encuentro, para confirmar cara a cara que un foro sobre pacificación en el que solo estén representados dos partidos del arco parlamentario no tiene sentido, máxime cuando de lo que se trata es de construir una convivencia en la que respete la pluralidad existente en el País Vasco.
El propio lehendakari, Iñigo Urkullu, fue contundente al respecto: «Sería muy fácil que dos partidos que tienen mayoría absoluta pudieran continuar, pero sería como seguir construyendo Euskadi en base a trincheras», manifestó. Entrevistado en Radio Euskadi, Urkullu insistió en que la ponencia parlamentaria es «el lugar y el espacio natural» en el que debatir «a cuatro» las cuestiones relacionadas con la normalización política. De ahí que afirmó no entender el paso dado por el PSE. «Los partidos políticos que quieran estar bloqueando la ponencia» no están ayudando a que vivamos este nuevo tiempo», denunció.
El lehendakari confió, en cualquier caso, en que el fracaso –al menos, por ahora– de la ponencia no arrastre al plan de paz abanderado por su Gobierno. Los partidos tienen de plazo hasta el próximo viernes para presentar sus aportaciones al mismo y su presentación ha despertado los recelos de todas las fuerzas políticas. Es más, los socialistas solicitaron al PNV aplazar los trabajos del foro hasta conocer cuáles eran las ‘enmiendas’ de EH Bildu al proyecto del Ejecutivo de Vitoria y ver si éstas iban encaminadas a asumir el «suelo ético» aprobado en las pasada legislatura.
«Inconcebible»
Los jeltzales optaron por mantener la cita de ayer, lo que propició una fotografía desangelada de la ponencia. Ahora bien, al término de la reunión –que se alargó durante una hora–, los portavoces de los dos únicos grupos que la integran comparecieron ante los medios de comunicación para poner en valor la vigencia del foro y criticar la marcha del PSE. Tanto PNV como EH Bildu se comprometieron a seguir trabajando para incorporar a PSE y PP a la ponencia y poder de esta forma reactivar plenamente su actividad. Se negaron así a dar por amortizado un órgano que consideran cuanto menos valioso para tejer acuerdos, si bien no se contempla nueva reunión del foro en el horizonte.
El burukide Joseba Egibar aseguró que su partido continuará «impulsando el diálogo para que la ponencia siga avanzando», al tiempo que afeó a los socialistas que abandonaran el grupo de trabajo apenas cinco meses después de su constitución. «Resulta inconcebible que renuncien al diálogo cuando lo que están en juego son la paz y la convivencia. ¿Cómo no vamos a hablar en el Parlamento vasco cuando esta casa es, precisamente, la casa de la palabra?», manifestó. El parlamentario jeltzale volvió en este sentido a invitar al resto de formaciones a «cambiar de rumbo» y sumarse a la ponencia, que esperan pueda «seguir trabajando, aunque de manera más pausada». «Es evidente que las condiciones se han alterado», asumió Egibar.
En la misma línea se pronunció la portavoz de EH Bildu, Laura Mintegi, aunque optó por una posición más buenista respecto a la situación en la que se encuentra el grupo parlamentario. De hecho, la coalición volvió a abogar mantener el calendario del foro –llevó al PNV una propuesta de comparecencias–, pese a las ausencias del mismo. Una oferta a la que no quisieron referirse los jeltzales, que ya la víspera habían descartado una futura reunión a solo dos bandas.
Mintegi, que insistió en que la coalición está dispuesta a «seguir trabajando por la paz en éste o en cualquier otro foro», se refirió asimismo a las palabras de Urkullu. La portavoz abertzale replicó al lehendakari que «si alguien ve trincheras –en alusión a construir Euskadi sin el PSE ni el PP–, las ve en su retina».
EL CORREO 14/09/13