Solo el apoyo del PSE a los jeltzales permitiría a Olano repetir como diputado general. Los socialistas no darán su respaldo sin un pacto que incluya Donostia, lo que deja vía libre al gobierno de la coalición
El PNV no hará ningún pacto con PSE-EE y PP contra Bildu, pero no renuncia a ninguna institución y presentará a todos sus candidatos en los diferentes plenos de investidura, entre ellos Markel Olano, aspirante a diputado general de Gipuzkoa. Así lo decidió ayer tarde el Euzkadi Buru Batzar reunido en Sabin Etxea, que posteriormente informó de lo acordado a la asamblea nacional de la formación peneuvista. La primera consecuencia clara de esta decisión es que Juan Karlos Izagirre (Bildu) toca ya con los dedos la Alcaldía de San Sebastián, ya que el PNV votará en esta institución a Eneko Goia, dejando sin opciones al nuevo candidato socialista, Ernesto Gasco. Sólo un más que improbable respaldo de PSE y PP a Goia podría evitar que Izagirre sea el nuevo alcalde.
La estrategia aprobada ayer por el PNV era la esperada para salir del laberinto en el que le han metido los resultados del 22 de mayo. El abultado triunfo de Bildu en Gipuzkoa y los mensajes lanzados en este territorio en los últimos meses en favor de la unidad de fuerzas abertzales imposibilitan a los peneuvistas apoyarse en los constitucionalistas para desbancar al candidato Martin Garitano de la Diputación, como proponen PSE-EE y PP. Al mismo tiempo, al presentar a Olano, el PNV trata de endosar la responsabilidad a PSE-EE y PP de la posible victoria de Bildu. La jugada se completa en Álava, donde los votos gratis de la coalición soberanista y el previsible apoyo de EB permitirán al PNV desbancar al PP y colocar a Xabier Agirre como diputado general. De esta forma, Álava compensaría la pérdida de Gipuzkoa, aunque en este territorio se pueden dejar por el camino numerosos ayuntamientos. El presidente del partido, Iñigo Urkullu, tiene previsto comparecer hoy ante la prensa para explicar la situación.
Desconfianza
La única posibilidad de que Olano sea diputado general de Gipuzkoa pasa por un apoyo de los socialistas. Pero el PSE-EE, por su parte, insistió ayer en que imposibilitará cualquier acuerdo para mantener al PNV al frente de la Diputación de Gipuzkoa si Donostia no está en el intercambio, según fuentes autorizadas de la ejecutiva socialista. «No pueden pretender quitar San Sebastián para dárselo a Bildu y que luego les apoyemos en la Diputación para quitársela a Bildu. No es razonable, ni explicable ni posible», sentencian los medios consultados. Así las cosas, la lógica y la matemática en Juntas invita a pensar en que Bildu gobernará la Diputación, aunque nadie se atreve a descartar giros de última hora por parte de ninguno de los protagonistas implicados, dado la importancia del poder político y económico que supone el control de la institución foral guipuzcoana.
En el caso de las diputaciones, el PNV matizó ayer, de forma algo críptica, que sus junteros respaldarán únicamente a sus cabezas de lista «salvo que de aquí a la celebración de los plenos de las tres Juntas Generales concurran otras circunstancias que ahora no se prevén».
Los socialistas insisten en que la oferta para apoyar a Olano incluye a cambio un paquete de tres municipios para los socialistas, San Sebastián, Errenteria y Andoain, en los que Bildu fue la fuerza más votada pero por poca ventaja sobre el PSE-EE. Los socialistas apoyarán al PNV en aquellos municipios donde los jeltzales precisen del respaldo socialista para gobernar. No obstante, el PSE-EE también exigirá que se respete el triunfo del partido en Lasarte-Oria y Trapagaran.
Bildu, de momento, es optimista. Tras reunirse en Sabin Etxea con el PNV, dentro de la ronda de contactos del EBB, Pello Urizar confirmó que los jeltzales no se sumarán a un «frente o bloque» junto a PSE y PP para evitar que la coalición abertzale pueda gobernar, aunque no les aclararon si presentarían a Olano. Las dos formaciones nacionalistas celebraron otra reunión similar en San Sebastián, en este caso de carácter local.