EL CORREO 27/09/13
· Los jeltzales recurrirán al lema ‘I am basque’ y defenderán un proyecto soberanista «en positivo, que no va contra nada ni contra nadie»
· Prometen «no olvidar» ni a quienes «lo están pasando mal» por la crisis, ni las «heridas aún abiertas por el terror»
Un año más, el PNV tiene lista ya la maquinaria para celebrar la tradicional fiesta del partido que, cada último domingo de septiembre, reúne a miles de militantes y simpatizantes en las campas de Foronda (Álava). Por primera vez desde que en 2009 los jeltzales perdieran Ajuria Enea, el Alderdi Eguna volverá al formato tradicional de doble discurso –el del presidente del EBB y el del lehendakari, ‘teloneados’ por un representante de las juventudes de EGI–, que exhibirán músculo soberanista bajo el lema ‘I am basque’. «Hoy más que nunca reivindicamos la existencia y, sobre todo, los derechos de Euskadi, una nación más entre las diversas naciones de Europa», recalcó ayer la secretaria del EBB, Pilar García de Salazar, que presentó el acto acompañada por el también burukide Joseba Aurrekoetxea.
En plena ebullición del órdago independentista de Artur Mas, cada vez más decidido a mantener la consulta anunciada en 2014 junto a sus socios de Esquerra, el PNV hará el domingo algún guiño a Cataluña –sendas delegaciones de Convergencia y de la Unió de Durán i Lleida se sentarán en la tribuna de invitados–, pero marcando distancias con la vía del president. De hecho, el lema elegido (‘Yo soy vasco’, en inglés) no es nuevo para la formación peneuvista, que se ha decantado por una frase que el lehendakari Agirre escogió como su «tarjeta de presentación» ante el mundo y que ya ha utilizado en campañas electorales anteriores.
No es casual que Sabin Etxea se inspire en la figura de José Antonio Agirre, que presidió un Gobierno de concentración desatada ya la Guerra Civil, como manera de subrayar su doble apuesta por el pacto interno y la proyección exterior de Euskadi. «No es un lema nuevo, y no lo es porque nuestra reivindicación es vieja y viene de muy lejos», subrayó García de Salazar, que insistió en defender la identidad de Euskadi como nación «ni peor ni mejor que las demás, diferente, única, singular, con los mismos derechos y obligaciones».
No obstante, el PNV, que ya ha dejado claro que la consecución del nuevo estatus no es asunto preferente de su agenda política –en la que tienen prioridad la salida de la crisis y el asentamiento de la paz definitiva en Euskadi– tratará de suavizar su mensaje para que no pueda interpretarse como un pulso estéril en tiempos de crisis económica o como una fuente de crispación o división social similares a las que puedan estar arraigando en Cataluña.
Según subrayó ayer García de Salazar, Euskadi «es una nación que construye su proyecto en positivo». «‘I am basque’ es una afirmación, no va contra nada ni contra nadie, Euskadi es un proyecto que construye», remachó la burukide, que eludió aclarar sobre qué bases pretende el PNV erigir ese proyecto de nueva relación bilateral con España y remitió a los discursos que pronunciarán el domingo Ortuzar y Urkullu. «Cuatro años después, estarán los dos », dijo, en alusión al regreso de la bicefalia a las campas de Foronda.
Hasta ahora, el PNV ha adelantado que pretende lograr un consenso de amplia base en Euskadi que pueda ser sometido a refrendo popular en 2015 previo pacto con Madrid y ha dejado claro, además, que el lehendakari renuncia a liderar ese proceso «para no dividir». Solo ha adelantado que aspira a lograr una relación política con el Estado similar a la que, en lo económico, rige el Concierto.
«De todas las ideologías»
No obstante, no ha sido ése el eje central del discurso del PNV en los últimos tiempos, marcados por la crisis económica, y la secretaria del EBB quiso subrayarlo también. «No olvidaremos que muchos vascos, de todas las ideologías lo están pasando mal, muy mal», recalcó, antes de reiterar que, para el PNV y el Gobierno autónomo, la «prioridad» absoluta es la recuperación económica y la creación de empleo.
García de Salazar citó también el segundo pilar de la acción gubernamental: la convivencia. «Tampoco olvidaremos que Euskadi es hoy un país que no ha logrado cerrar las heridas abiertas durante largas décadas de terror, dolor y muerte», subrayó la dirigente jeltzale, que hizo un llamamiento a «curarlas entre todos» con una receta muy alejada, por ejemplo, de la negativa de la dirección de EiTB a citar a ETA: «Reconocimiento del daño causado, deslegitimación de la violencia, reparación, cariño y cercanía hacia las víctimas», resumió.
EL CORREO 27/09/13