Los nacionalistas vascos aseguran estar dispuestos a apostar hasta el final y ya advierten de que tienen lista una enmienda a la totalidad a las cuentas del Estado que presentarán o no –el plazo finaliza mañana viernes a las 14.00 horas– dependiendo de la actitud que palpen en el Gobierno en los próximos días.
Más aún, fuentes parlamentarias indican que la enmienda podría presentarse y luego ser retirada en cualquier momento antes de la votación. El Pleno del Congreso en el que se discutirán y votarán las enmiendas a la totalidad de los Presupuestos se celebrará los próximos miércoles y jueves. Las mismas fuentes explican que la distancia con el Gobierno se mide ahora más en términos políticos que económicos, pero rehúsan detallar las demandas precisas que se han puesto sobre la mesa.
Las competencias en materia de política penitenciaria y una estrategia de acercamiento de presos son cuestiones que siempre están en la carpeta negociadora del PNV, aunque en este momento no se confirma oficialmente. La negociación sobre aspectos políticos que superan el terreno de los números se lleva a cabo entre Moncloa y la Lehendakaritza.
Desde el PNV se asegura que los últimos casos de corrupción en el PP «no ayudan» a la hora de tomar posición al lado del Gobierno, si bien precisan que su intención es la de distinguir escrupulosamente entre las cifras que pueden beneficiar a los vascos y otros asuntos.
En este sentido, las fuentes consultadas afirman ser conscientes de que el otro gran asunto de máximo interés para Euskadi, la negociación del Cupo, no puede solventarse «en cuatro días», pero sí se dicen pendientes de calibrar la disposición a futuro del Gobierno central para abordarlo en profundidad. De dicha voluntad, señalan, «pueden depender muchas cosas».
Desde el Ministerio de Hacienda, por su parte, se intenta trasladar un mensaje de tranquilidad. «No hay más margen; la goma de los Presupuestos no puede estirarse más: da para lo que da», afirman. Así, se muestran convencidos de que en los próximos días se producirán momentos de tensión propios de los últimos escarceos negociadores. Es en estos términos como se interpreta en el equipo de Montoro la advertencia de ayer del portavoz vasco en el Congreso, Aitor Esteban, sobre la posibilidad de presentar una enmienda a la totalidad del proyecto de cuentas del Estado.
En Hacienda afirman que por el lado de los números «ahora no se puede apretar más», pero que «hay tiempo por delante y se podrá avanzar paso a paso». Este es el mensaje que el propio Montoro le ha transmitido al PNV esta misma semana, a lo largo de la cual los contactos han sido continuos.
«Si deciden no apoyar los Presupuestos de 2017, que se lo expliquen a sus ciudadanos», señala una fuente destacada del Ministerio que recuerda, además, que estas cuentas son en realidad una suerte de pista de lanzamiento que tendrá su continuidad en el proyecto de Presupuestos para 2018, que deberá empezar a perfilarse en apenas unas semanas.
«Nadie entendería que pidieran la devolución de los Presupuestos del 2017 y a continuación se prestaran a apoyar el techo de gasto para 2018», argumentan en Hacienda, donde recuerdan que, de lo que se trata en última instancia no es sólo de sacar adelante el proyecto, sino de trazar un camino que permita la «gobernabilidad» y «seguir avanzando en la recuperación».