EL PAÍS, 26/5/12
Reconoce que se debió explicar “mejor” el plan para los presos
La estrategia de dispersión de presos de ETA deja de “tener sentido” si la banda se disuelve. Al margen de esta filosofía, recogida en la ponencia política del PP vasco y avalada por Interior y la dirección nacional, un sector del partido reconoce que, tras el cese definitivo de la violencia etarra el pasado 20 de octubre, la lucha antiterrorista se sitúa ante un nuevo escenario. Y precisamente en esta “nueva situación” encaminada a la desaparición de la banda hay quien ya se plantea el “sentido” de esa dispersión.
El PP suele acompañar todos sus mensajes sobre política penitenciaria de cautelas y condiciones vinculadas a la desaparición de ETA. Aun así, en el partido admiten que hay que “afrontar la nueva situación con suficiente inteligencia”, sin ponerse “una camisa de fuerza”. Lo que incluye contemplar el acercamiento suavizando sus requisitos, aunque “algunos digan que es una cesión”.
Fuentes populares aseguraron este viernes que la estrategia del Gobierno, centrada en el plan de reinserción anunciado en abril por elMinisterio del Interior, no está reñida con la posición clásica del partido. Esto es: no ha cambiado el PP, sino las circunstancias. La postura de la formación, insisten, no ha retrocedido “ni un ápice” en relación con la defensa de las víctimas y los requisitos necesarios para acogerse al plan impulsado por el departamento que dirige Jorge Fernández, y al que podrían sumarse entre “100 y 200” reclusos que quieren desvincularse de la banda.
“Los movimientos de presos este Gobierno no los va a hacer por la clientela política”, apuntaron las mismas fuentes, al recordar que Interior no pide como nueva condición la petición de perdón, porque ese requisito ya lo exige el Código Penal para poder acceder a beneficios penitenciarios.
El PP concede que el Gobierno y el mismo partido debieron explicar “mejor” este plan que, asegura, “está al servicio de la derrota de ETA”. Por ello, la dirección del partido en Euskadi cree que “no hay motivos” para que se celebre la manifestación que las víctimas del terrorismo han convocado para el 9 de junio. No obstante, los populares reconocen que en los últimos meses la relación con las asociaciones ha sido en muchos casos tirante, incluso de abierto enfrentamiento. Y en este sentido, admiten que el plan necesitaba “cierta cocina con las víctimas y con los medios”. Esta tensión está alentada también por propios miembros del PP, como el portavoz en el Parlamento Europeo, Jaime Mayor Oreja, que acercó a más de 100 presos cuando estaba al frente de Interior. “Somos partidarios de utilizar un tono más suave, en vez de usar el trazo grueso y luego acercar a 140”, apuntan ahora en el partido.
El tono es precisamente la clave de la política del PP en este ámbito, ya que, según explicaron este viernes las mismas fuentes, “además de dar un paso para terminar con ETA, es muy importante que nos entienda la sociedad vasca”. Precisamente en Euskadi, el lehendakari, Patxi López, elevó este viernes su discurso en favor de una política penitenciaria más flexible al afirmar que con ella se debe “buscar justicia y no venganza”, informa Unai Morán. En su momento, apuntó, se ajustó la legalidad para convertirla en una herramienta más de la lucha contra ETA, pero a raíz del nuevo escenario abierto en Euskadi, se debe reorientar para “ayudar a construir la convivencia”.
EL PAÍS, 26/5/12