ABC 24/01/14
· La Convención del PP catalán, que se inicia hoy, es el punto de partida del Gobierno para «desenmascarar las mentiras» de Mas sobre España.
Desde la página 1 Cataluña se encontrará con una deuda de 50.000 millones, sin acceso al Banco Central Europeo y al Fondo Monetario Internacional, y los catalanes serán entre un 25 y un 30 por ciento más pobres. Esta es la situación de deterioro económico en la que se encontraría esta Comunidad si se separara de España. Se trata de unas cifras admitidas ayer por el Gobierno y utilizadas públicamente por el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo en Onda Cero, y que son un avance del paso al frente que empezará a dar hoy el Gobierno, en el marco de la la Convención del PP catalán, para «desenmascarar las mentiras» de Artur Mas.
El Ejecutivo ha pasado al ataque y hoy el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, y mañana el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, durante la clausura de este cónclave catalán, empezarán a aportar datos concretos y argumentos para desmontar el «victimismo» de Mas frente al resto del Estado y el mantra del «España nos roba». Se trata de responder a esa lista de agravios que el Gobierno de la Generalitat elaboró en octubre de 2013 y que cifraba en 9.375 millones. Cincuenta folios con los que querían justificar que la situación de quiebra de Cataluña no es solo consecuencia de la crisis económica, sino de las políticas de Rajoy contra esta Comunidad.
Deterioro
El anticipo en forma de datos aportado ayer por el titular de Exteriores pone también el acento en otras cuestiones que influirían en el deterioro de Cataluña si se independiza, como es la necesidad de pagar aranceles para su comercio exterior. Igualmente, y en lo que se refiere al «orden internacional», el ministro apunta que Cataluña se situaría en el «limbo jurídico». GarcíaMargallo duda de «que hubiese muchos países fuera de la Unión Europea que reconociesen un Estado que nace de una declaración de independencia».
Con estos argumentos, el Gobierno trata «de advertir a los catalanes que pretenden una secesión de España de cuáles serían las consecuencias para Cataluña de esta secesión», subrayó el ministro de Asuntos Exteriores. Una tesis que expondrá hoy el ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, durante su participación en la Convención del PP catalán. El ministro «demostrará con cifras que es mejor para Cataluña vivir dentro que fuera de España», según aseguraron a ABC fuentes gubernamentales.
Una de las cifras que utilizará hoy Montoro para sostener su tesis es el dinero que ha recibido Cataluña del Estado durante estos dos últimos años, con el objetivo de evitar la quiebra. Concretamente han sido 23.965,8 millones en 2012 y 2013. De esta cantidad, 17.499,9 corresponden al Fondo de Liquidez Autonómico (FLA), habilitado por el Gobierno de Rajoy ante la imposibilidad de varias comunidades de recurrir a los mercados para financiarse. Es la Comunidad que más fondos recibe. De este importe total, 6.664,8 fueron aportados en 2012 y 10.835,1 en 2013.
Junto a este fondo, el Gobierno también ha inyectado a Cataluña 6.476,8 millones de euros con cargo al plan de pago a proveedores. Una medida destinada a pagar las facturas que se adeudaban y que se encontraban retenidas por la Generalitat al no poder abonarlas. La mayor parte de este importe corresponde a 2013, un total de 4.456,6 millones; mientras que los 2.020,2 millones restantes son del año 2012.
Lista de agravios
No solo será el ministro Montoro el que rebatirá con cifras la lista de agravios de Artur Mas, sino que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, tiene previsto pronunciar un «discurso de calado» durante su intervención en la jornada de clausura. Las palabras que pueda decir Rajoy están rodeadas de una gran expectación, ya que el presidente no ha vuelto a Cataluña a un acto de partido desde las elecciones autonómicas de noviembre de 2012.
Desde el Partido Popular en Cataluña se ve con satisfacción el hecho de que el Gobierno pase al ataque contra Artur Mas y aplauden el desembarco de miembros del Ejecutivo. «Faltan argumentos, falta información y tienen que darla los que tienen el altavoz», aseguran fuentes de los populares catalanes, para las que la Convención que comienza hoy «es solo un punto de partida».
ABC 24/01/14