DIARIO VASCO, 21/3/12
Presiona a su socio pero descarta que afecte al pacto de Gobierno. Apunta también al PNV y solicita una comisión en Juntas de Bizkaia sobre la filtración de los datos fiscales del cuñado del lehendakari
El PP vasco va a entrar a fondo en el caso Melchor Gil. Los populares apuntan al PNV y reclamarán una comisión de investigación en las Juntas Generales de Bizkaia por la presunta filtración de sus datos fiscales. Pero, al mismo tiempo, pedirán al PSE-EE una «investigación política» sobre las actuaciones de su vicesecretario general vizcaíno y cuñado del lehendakari, para comprobar si cometió irregularidades en la compra de un chalé, según anunció a este periódico el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti.
DATOS
Caso: Hacienda de Bizkaia duda del origen de 419.000 euros que Melchor Gil había destinado a pagar un chalé en Castro Urdiales, cuyo coste total ascendió a más de 800.000 euros.
Investigación: El fiscal archivó de forma provisional el caso el año pasado, pero en enero Hacienda insistió. Investiga un presunto delito de tráfico de influencias.
Denuncia: El PSE-EE cree que el dossier con datos confidenciales se ha filtrado desde la Hacienda de Bizkaia, en manos del PNV, para desgastar al lehendakari.
A los populares no les tiembla el puso a la hora de calificar de «grave» el comportamiento de Gil, estrecho colaborador de Patxi López. Pese a este cuestionamiento, la formación de Basagoiti salvaguarda el pacto para el Gobierno Vasco, ya que esta cuestión no afecta al núcleo del acuerdo de bases.
El PP considera que en todo este asunto hay dos asuntos «graves»: la presunta «filtración» desde la Hacienda de Bizkaia, dirigida por el PNV, de datos «confidenciales» de un contribuyente; y el hecho de que «un vicesecretario general del PSE-EE de Vizcaya pague con billetes de quinientos euros una vivienda cuyo valor no cuadra con su nivel de ingresos», señalan desde la ejecutiva popular. Por ello, quieren que se aclare tanto la fuga del expediente fiscal, como la forma en que logró ampliar Gil un patrimonio personal que en el PP no dudan en calificar de «dudoso».
Vertiente judicial
En este segundo caso, el PP estudia qué tipo de investigación podría articularse, ya que Gil no ocupa cargo en ninguna institución, por lo que no podría ponerse en marcha una comisión parlamentaria al respecto. No obstante, la formación de Basagoiti reclama al PSE-EE una investigación propia que concluya, si es el caso, con un reproche político, y que incluya una vertiente judicial si aparecen evidencias de presuntos delitos. En cualquier caso, el PP, de momento, no pedirá la dimisión de Gil.
La polémica surgida en torno al hermano de la mujer de López no ha pillado del todo por sorpresa a los populares. De hecho, en este partido nunca han ocultado la extrañeza por los cargos empresariales que ha venido ocupando en diferentes compañías. «Todo el mundo sabe que esos puestos eran superiores para su formación profesional», explican los medios consultados. A los populares no les preocupa tanto la circunstancia de que Melchor Gil sea «cuñado del lehendakari como que sea un significativo dirigente de los socialistas vizcaínos». Pese a que el PP va a elevar la presión a los socialistas a cuenta del caso Gil, las fuentes consultadas precisan que en ningún caso afectará al pacto de gobierno que mantienen en Euskadi. Explican que el caso Gil no tiene relación con el Gobierno Vasco y se limita al ámbito de los partidos políticos. No obstante, a nadie escapa que las periódicas tensiones entre las dos fuerzas constitucionalistas pueden minar la entente que llevó a López a Ajuria Enea.
Mensaje al PNV
En el PP también creen necesario zanjar las dudas en torno a la actuación de la Hacienda de Bizkaia, en manos del PNV, para que los ciudadanos tengan garantizado que no hay peligro sobre la confidencialidad de los datos fiscales. Pese al acercamiento de los últimos meses entre estas dos formaciones, los populares quieren situarse en posición intermedia en el caso Gil y no renuncian a criticar a los nacionalistas vascos si se demuestra que el expediente fiscal salió de la propia institución foral con intención de desgastar al lehendakari.
Mientras, Gil ha pasado al contraataque. El lunes presentó una querella penal que se suma a una denuncia ante la Agencia Vasca de Protección de Datos formalizada el viernes por la supuesta filtración de «documentos personales y confidenciales». Los socialistas creen que la Diputación de Vizcaya podrían enfrentarse a «una multa multimillonaria». El portavoz del PSE, José Antonio Pastor, denunció que el expediente filtrado sólo tiene sello de Diputación y no el de entrada en la Fiscalía. Por ello, descarta que se le haya ocurrido a algún funcionario asumir «el enorme riesgo» de «sacar 400 folios y depositarlos en tres periódicos».
DIARIO VASCO, 21/3/12