EL MUNDO – 12/04/16
· A dos semanas de que finalice el tiempo para lograr un acuerdo de gobierno y evitar la repetición de las elecciones, el PP permanece por el momento a la espera de la ruptura definitiva entre Pedro Sánchez y Pablo Iglesias –que se espera que se materialice tras la consulta que Podemos hará a sus bases a finales de esta semana y cuyos resultados se conocerán el lunes que viene– y al enfriamiento total de las relaciones entre el líder socialista y Albert Rivera –una vez asumido que su pacto ha muerto de forma definitiva–.
Cuando eso suceda, en el PP afirman que no descartan nada, por mucho que la opción más plausible sea la repetición de los comicios.
Este periódico publicó ayer que Mariano Rajoy se reserva una oferta final al PSOE, que pasaría por proponer a Sánchez ser vicepresidente, por reformar la Constitución, por profundizar en medidas de regeneración, por cambiar en temas puntuales el rumbo de la política económica y por elaborar de forma conjunta una nueva Ley Electoral.
Una propuesta concreta que el presidente lanzará en el momento final, cuando hasta los socialistas estén ya convencidos de que las elecciones son la única salida. Un último intento que todos en el PP dan por hecho y que se producirá una vez que hayan fracasado el resto de alternativas de Gobierno en torno a Pedro Sánchez.
En este contexto de final del proceso, de último tramo de las negociaciones, el vicesecretario de Comunicación del PP, Pablo Casado, confirmó ayer que la opción de proponer que Sánchez sea vicepresidente «entra dentro de las posibilidades». A lo largo de estas semanas, distintos portavoces populares han considerado natural este reparto en una potencial gran coalición. Con la diferencia de que ya no estamos al comienzo del proceso, sino al final, y los movimientos son definitivos.
Ayer Casado recordó que desde el principio la fórmula planteada por Rajoy siempre ha estado abierta a tres posibilidades. Una, un entendimiento que permita únicamente la investidura. Dos, un pacto de legislatura. Y tres, un pacto de gobierno con presencia –explicó el vicesecretario de Comunicación– tanto de «ministros con carné como de independientes».
Aunque aseguró que la oferta «no se ha formulado como tal», Casado confirmó que a raíz de la portada de este diario este asunto se trató ayer en la reunión del Comité de Dirección del partido, que presidió el propio Rajoy. El presidente del Gobierno en funciones no quiere que los socialistas interpreten que les envía un mensaje a través de los periódicos, según señalan fuentes del PP. Pero para los populares es fundamental transmitir que por ahora no se cierran a nada.
Casado afirmó sin dudas que todavía «hay tiempo para pactar» y para llegar a conformar un Gobierno y un acuerdo político a última hora. «La pelota está en el tejado de Pedro Sánchez», defendió. «Quien no quiere hablar es él», insistió.
De hecho, el dirigente popular aclaró que el PP no está pidiendo un cambio de interlocutores en el PSOE –a pesar de que Andrea Levy o Javier Arenas reclamaran el pasado fin de semana a Sánchez que dé un paso al lado–, pero sí exigen a los socialistas que «rompan las negociaciones con Podemos» y que no mantengan reuniones secretas con Oriol Junqueras. Esas son las únicas condiciones. Que, si llega el momento de abrir conversaciones, los socialistas sean sinceros en su voluntad de acuerdo. Ellos reiteran que «están abiertos a dialogar».
EL MUNDO – 12/04/16