EL CORREO 02/11/13
· El delegado del Gobierno dice que los socialistas se han sumado al «borrón y cuenta nueva» del pasado y Patxi López replica que «no se puede pasar por encima de la ley»
La apuesta del PP por declarar personas ‘non gratas’ a los etarras excarcelados en aplicación de la sentencia de Estrasburgo sobre la ‘doctrina Parot’ volvió a enfrentar ayer públicamente a los populares y el PSE. Mientras Carlos Urquijo acusaba a los socialistas vascos de «sumarse a la prisa que tienen algunos por el borrón y cuenta nueva», Patxi López llamó a no caer en la «batalla de las declaraciones» y a respetar los fallos judiciales.
La división sobre esta delicada cuestión se hizo patente desde el primer momento. En Tafalla, municipio del que es natural la ahora ex presa de ETA Inés del Río –primera en salir en libertad–, los ediles del PSN abandonaron el pleno del Ayuntamiento, que reprobó a instancias de los conservadores de UPN a Del Río. La historia se repitió en Villava –aunque aquí se rechazó la declaración– y posteriormente, este mismo jueves, en Portugalete. El alcalde de la localidad vizcaína, Mikel Torres, fue tajante. «El Ayuntamiento no tiene ninguna competencia para nombrar a nadie persona ‘non grata’», declaró, en alusión a la moción de urgencia presentada por el PP –y que no se llegó a votar– con el objetivo de demostrar el rechazo al exrecluso de ETA Juan Manuel Píriz, que ha regresado a la villa tras salir de la cárcel.
En línea con lo manifestado por sus representantes en estos municipios, el secretario de Organización del PSE, Rodolfo Ares, también se mostró en contra de las iniciativas del PP y UPN porque, según valoró, los conservadores solo buscan generar «ruido» y «colocarse al frente del dolor de las víctimas». «La democracia es acatar las decisiones judiciales cuando nos gustan y cuando no», señaló. Desde el Gobierno y el PP, el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, exigió al PSOE que se distancie en las instituciones de la izquierda abertzale.
Explicaciones «peregrinas»
La polémica, sin embargo, no acabó ahí. El delegado del Gobierno en Euskadi, Carlos Urquijo, arremetió ayer contra los socialistas, a quienes recordó que lejos de «colaborar en una especie de blanqueamiento de la historia del terror», es preciso «establecer un reproche social con quienes han practicado la violencia y siguen jactándose de haberlo hecho». El PP sostiene que los terroristas no arrepentidos deben ser calificados como personas ‘non gratas’ por su «biografía contraria a los derechos humanos y a los principios democráticos». Urquijo calificó de «peregrinas» las explicaciones del alcalde de Portugalete y lamentó que el PSE «se haya sumado a la prisa que tienen algunos por el borrón y cuenta nueva», en alusión al pasado de violencia en Euskadi.
La réplica vino del secretario general de los socialistas en Euskadi. Patxi López aseguró echar de menos «en muchos responsables políticos la pedagogía democrática» porque «no se puede pasar por encima de la ley». El líder del PSE reconoció que «un terrorista que ha asesinado y no se ha arrepentido merece toda la repulsa». Ahora bien, «las instituciones están para respetar las sentencias. El PSE defenderá en los ayuntamientos en los que se presenten las mociones que sigan comprometidos con la defensa del Estado de Derecho y que respeten las decisiones de los tribunales», apostilló López.
La intención original del PP pasaba por repetir las mociones en otros municipios a medida que haya nuevas excarcelaciones. Por ahora, la formación conservadora se ha quedado sola, al igual que UPN en Navarra.