EL MUNDO 20/01/14
· El Gobierno se va a tomar su tiempo para responder a la petición del Parlament de un traspaso de competencias para la convocatoria de una consulta indepentista. Su plan es apuntalar una alianza parlamentaria con el PSOE, que los populares querrían extender incluso a la celebración de actos conjuntos para frenar a Artur Mas.
Pese a tener claramente decidido su no a la demanda catalana, Rajoy se plantea como prioridad que la respuesta del Congreso esté respaldada en todos sus detalles por una amplísima representación de la soberanía nacional. Las fuentes consultadas aseguran que el Gobierno dilatará dicha respuesta todo el tiempo preciso para pulir un pacto con el PSOE que, de hecho, en sus líneas centrales, ya está logrado, pero que los populares desearían escenificar ante los ciudadanos incluso celebrando actos junto a los socialistas.
El acuerdo político, al Ejecutivo se le antoja perfectamente factible en tanto Rubalcaba «aguante» al frente del PSOE. Y es que el secretario general de los socialistas –que, pese a la labor de oposición diaria, mantiene un contacto fluido con Rajoy sobre los asuntos considerados de Estado– representa una secreta garantía de entendimiento para los populares.
Tanto es así, que el Gobierno ha celebrado la recién acordada convocatoria de primarias para noviembre como un blindaje de Rubalcaba, justamente hasta la fecha en que se consumaría el anunciado desafío secesionista de Artur Mas. «Es una buena noticia para España que Rubalcaba siga siendo el interlocutor», confesaba un miembro del Consejo de Ministros.
La decisión de los socialistas –hilvanada desde la celebración de su Conferencia Política el pasado noviembre–, ha calmado la inquietud de los populares que, según las mismas fuentes, se habían planteado dar una más rápida respuesta a la esperada resolución del Parlament si la fecha de las primarias se hubiera situado en el entorno de las elecciones europeas, es decir, antes de las vacaciones de verano.
En línea con este planteamiento del Ejecutivo, una de las conclusiones del cónclave de Toledo entre Rajoy y la cúpula del PP fue, precisamente, la necesidad de ir de la mano del PSOE en relación con Cataluña. «Las defensa de la unidad de España no puede sólo ser cosa del PP», decían en el partido, desde el que se plantean, incluso, y de manera expresa, la oferta de realizar «actos políticos juntos».
El vicesecretario general de Estudios y Programas, Esteban González Pons, lanzó precisamente el guante al PSOE este pasado sábado: «Nada nos gustaría más que se nos viera a socialistas y populares haciendo al lado unos de otros una campaña en la que diga solo y claramente que juntos los españoles siempre estamos mejor». Para los populares, el referente es la campaña de los unionistas británicos Better together (Mejor juntos), con la que conservadores, liberales y laboristas han hecho frente al desafío soberanista escocés mediante una única estrategia y una serie de actos conjuntos.
Las tensiones internas del PSOE y el PSC no han hecho sino entrorpecer el sueño de los populares, hasta el punto de que este fin de semana el propio Pons les preguntaba «cuándo van a dejar de preocuparse de sus asuntos internos» para ocuparse «de los problemas de España». Pese a ello, el vicesecretario popular insistía en invitarles «a que «acudan a echar una mano en el problema planteado por los políticos catalanes».
Por su parte, en el primer partido de la oposición el llamamiento popular de este fin de semana apenas ha hecho mella. Desde la dirección socialista reivindicaban como una posición política propia, de partida, su oposición al derecho a decidir defendido por Artur Mas y sus aliados independentistas, junto con los tres diputados díscolos del PSC, que han mantenido a capa y espada el planteamiento, ahora relegado, de su programa electoral.
En este sentido, aseguraban que su no a la petición de transferir a Cataluña la competencia para celebrar una consulta independentista está decidido. D esta manera, el PSOE se sumará al PP y también a UPyD. Juntos supondrán el 86% de la Cámara. Los socialistas también recuerdan que el PSC siempre ha sido un partido distinto al PSOE, aunque éste acoja en su Ejecutiva una representación de aquél.
En cuanto a la propuesta de compartir actos para escenificar su posición frente al independentismo, los socialistas puntualizaban que donde hay que dar visibilidad a la postura común es en el Parlamento y, en este sentido, insistían en que el primer paso corresponde a los populares, dando el visto bueno a la propuesta de Rubalcaba de constituir en el Congreso una subcomisión o comisión temporal para debatir sobre el modelo territorial.
Sería en este ámbito, según las fuentes consultadas en la dirección del PSOE, donde cabría analizar y formar una sola posición en relación con el desafío catalán. Los populares recibieron el pasado martes, de manos del presidente del Congreso Jesús Posada, la proposición del líder socialista. Su aceptación o rechazo podría ser votada este mismo martes en la Junta de Portavoces de la Cámara Baja.