EL CORREO 28/07/13
· El fiscal superior no ve responsabilidades en los populares de Euskadi porque desconocían la procedencia del dinero que les mandaba Génova.
La parlamentaria del PP vasco Laura Garrido señaló ayer que las manifestaciones del extesorero del partido Luis Bárcenas en torno a que la formación pagó en Euskadi a víctimas de ETA con ‘dinero negro’ «rozan claramente la mezquindad».
Garrido denunció que Bárcenas «no tiene ningún tipo de escrúpulos en la estrategia que ha diseñado para hacer daño al PP», al tiempo que hizo hincapié en que «el que tiene dinero fuera y el que tiene que explicar el origen del dinero es él».
En lo que respecta al PP del País Vasco, acusado por Luis Bárcenas de entregarle en efectivo casi un millón de euros procedentes de comisiones y donativos ilegales entre los años 1999 y 2005, Garrido recordó que «hemos hecho un ‘striptease’ de nuestras cuentas en un ejercicio de absoluta transparencia». «Hemos explicado la información relativa a la sede del PP de Bizkaia», dijo, incidiendo en que «hemos respondido con absoluta celeridad y transparencia a las informaciones aparecidas». «Me gustaría que otros partidos con representación en el País Vasco también hicieran ejercicios semejantes de transparencia», afirmó.
Para Calparsoro está claro
Mientras, el fiscal superior del País Vasco, Juan Calparsoro, aseguró ayer que no tiene por qué haber responsabilidades en el PP vasco si éstos desconocían que el dinero que les entregó el Partido Popular nacional era de procedencia «ilícita».
Calparsoro afirmó que a la Fiscalía vasca no ha llegado ninguna denuncia sobre la presunta financiación irregular de la sede del PP en Bilbao, aunque, si se formalizara, «lógicamente se tendría que investigar». No obstante, indicó que hay que distinguir entre «lo que la persona que entrega el dinero sabe y conoce y lo que la persona que lo recibe sabe y conoce».
El fiscal superior recordó que no se ha dicho «nada» de que los responsables del PP vasco tuvieran conocimiento de que ese dinero pudiera provenir supuestamente «de unos fondos ilícitos», ya que se lo entregaba el partido nacional desde la calle Génova, «el órgano central que llevaba las cuentas».
EL CORREO 28/07/13