EL CORREO 30/10/14
El futuro Instituto vasco de la Memoria no nacerá con el consenso esperado. La secretaria general del PP, Nerea Llanos, avanzó ayer que su partido mantendrá su voto contrario a la creación de este organismo por considerar que «mezcla realidades» con el objetivo de «alimentar la teoría del conflicto».
La ponencia que deberá dar cauce a la proposición de ley de creación de este centro –que nada tiene que ver con el memorial por las víctimas del terrorismo– celebró a principios de septiembre su primera reunión. En ella, PNV y PSE, impulsores de esta iniciativa, reiteraron su intención de mantener el espíritu del futuro instituto tal y como lo han pactado, sin admitir, en aras del consenso, enmiendas que «desdibujen» el proyecto. Ahora bien, apostaron por extender el consenso en torno una proposición que no tardó en despertar los recelos de EH Bildu y el portazo de PP y UPyD.
Los populares, según reveló ayer Llanos, han logrado que sean admitidas 18 de las 64 enmiendas que presentaron en su día al texto original, en el que se recogen los fundamentos del futuro instituto. Pero todas ellas, lamentó, versan sobre la «técnica legislativa», pero no sobre «el fondo» de la cuestión. La secretaria general del PP vasco insistió en que el centro debería destinarse a las «víctimas del terrorismo», en lugar de «diseñar una mezcla» de estas últimas con las de la Guerra Civil y la dictadura franquista. Está previsto que el Instituto de la Memoria aborde todas las violencias sufridas en Euskadi.
Llanos censuró que «algunos siempre hayan tenido el la intención de «alimentar la teoría del conflicto» y no dudó en mostrar su «estupor» por el hecho de que el PSE «haya entrado» ahí. Desde el PP tienen claro que el centro debería «objetivar quiénes son las víctimas del terrorismo en democracia» y emplazarse en Ermua, no así en Gernika, tal y como se propuso desde el Gobierno vasco.