EL MUNDO 16/08/13
· El alcalde de CiU les destituyó por no apoyar el cambio de nombre de la plaza de España.
El PP denunció ayer que CiU y el presidente de la Generalitat, Artur Mas, se proponen empujar a los ayuntamientos al independentismo «por culpa de una obsesión enfermiza» por la consecución de un Estado propio que, según los dirigentes populares, los arrastra a priorizar la defensa de las aspiraciones soberanistas por encima de los problemas de los catalanes. Los acusa de pretender imponer «la estelada y la ruptura de España» por encima de la economía.
Así se expresó el portavoz del PP en el Parlament, Enric Millo, quien respondió a la decisión del alcalde de Sitges, Miquel Forns (CiU), de suspender temporalmente las atribuciones y las competencias de los tres ediles populares que resolvieron tomarse un período de reflexión por su oposición al cambio de nombre de la plaza y de la calle de España. Para Millo, la decisión del alcalde de Sitges es «insólita, injustificada y temeraria» porque, además, los vecinos «no quieren este tipo de problemas y conflictos, ni el PP está dispuesto a tolerar este tipo de actitudes».
El entorno del alcalde respondió que su intención no es trasladar «al terreno ideológico» la cuestión del nombre de la plaza de España, que data de 1907 y ha sido cambiada por Bassa Rodona. La suspensión de los ediles es «temporal» en tanto que «son bienvenidos a reincorporarse en cuanto decidan poner fin a su período de reflexión», subrayó el portavoz municipal, Jordi Mas. «Respetamos su decisión», añadió, antes de zanjar que «no podemos permitirnos tener concejales parados. Deben tomar una decisión».
La determinación del alcalde supone el estallido del pacto de Gobierno sellado entre CiU y PP dos años atrás. Desde las filas del PP local, la situación se vive como un ultimátum del alcalde convergente a los tres ediles disconformes con el cambio toponímico. «Ante la retirada de las atribuciones económicas, nuestra respuesta es que es muy complicado que el PP pueda volver al equipo de Gobierno», aseguró ayer a este diario uno de los ediles afectados, Jorge Carretero, quien apostilló que «o CiU rectifica inmediatamente o se ha roto definitivamente el pacto». Tanto Millo como Carretero defienden que, hasta este episodio, observaban «positivamente» el acuerdo, ya que «ni en el programa de CiU ni en el pacto había decisiones como ésta».
Respecto al supuesto absentismo laboral de los ediles del PP, Carretero, responsable de la Policía Local, respondió que «hemos estado hasta el último día trabajando, porque irse a las bravas, como pretende hacer creer CiU, hubiera sido contraproducente».
Con el pacto roto, CiU se expone a perder la Alcaldía, que podría acabar en manos del PSC, el partido más votado en las municipales; para ello, debería prosperar una moción de censura y una alianza de los socialistas con el PP.
Además de con el PP, CiU desbancó de la Alcaldía al PSC con ayuda del Grup Independent y Nou Horitzó Sitges. Las dos formaciones independientes también votaron en contra de la modificación, mientras que el PSC se abstuvo, por lo que la moción salió adelante con el apoyo de CiU y de la formación que la propuso, la CUP.
EL MUNDO 16/08/13