ABC, 12/7/2011
El Parlamento vasco constituyó ayer de manera formal la ponencia sobre las «víctimas de violencia política» del Estado, en reconocimiento a quienes en el País Vasco han sufrido «abusos policiales» desde el tardofranquismo hasta la actualidad.
Este foro parlamentario, que nace con el apoyo de PSE, PNV, EA, EB (IU) y Aralar y la firme oposición de PP y UPyD, reclama la necesidad de abrir un espacio institucional para rescatar del «olvido» a estos damnificados, de los que supuestamente se cuentan en centenares, y a quienes se les quiere resarcir con subvenciones y reconocimiento público. Los partidos que integran la ponencia —incluido el PSE— estudian que el lendakari, Patxi López, en nombre de las instituciones vascas, pida perdón a estas víctimas por el «olvido» al que se han visto sometidas. Un gesto —dicen— equiparable al que tuvo el ex lendakari Ibarretxe con las víctimas de ETA en 2007, con el que solemnizó «la deuda pendiente» que la sociedad y sus representantes tuvieron durante años con ellas.
PP y UPyD no participarán en las reuniones de este foro al considerar que supone dejar la puerta abierta para que el «brazo político» de ETA «reescriba y disculpe la historia criminal» de la banda. Según denuncia el parlamentario popular Carlos Urquijo, existe el «riesgo» de que «algunos aprovechen este altavoz para establecer «paralelismos inadmisibles» entre las llamadas víctimas de «violencia estatal» y las de ETA. El PP teme que Aralar y EA inviten al legislativo vasco a colectivos próximos a ETA que denuncian torturas. «Somos partidarios de que la Justicia reconozca y repare a quienes han podido sufrir algún tipo de abuso por parte de los Cuerpos policiales, pero tenemos muy claro que existen unas líneas rojas que no se pueden traspasar y éstas son la distinción clara entre las víctimas de ETA y los afectados por otro tipo de violencia», señala Urquijo.
Desde el Gobierno vasco rechazan «equiparaciones», aseguran que no habrá ningún etarra en el informe de víctimas y se muestran convencidos de que esta iniciativa (iniciada en tiempos de Ibarretxe) reforzará al Estado. «No se pone en cuestión la legitimidad de la lucha contra ETA, al contrario, reconocer los errores cometidos fortalece», dicen.
ABC, 12/7/2011