Santiago González, santiagonzalez.wordpress.com, 12/12/11
José Antonio Pastor salía hoy en El Correo, tal como aquí aparece, con ese titular pasmoso, al que sólo le cuadra la categoría de la mentira, en la definición estricta de los catecismos de antaño. Mentir es decir lo contrario de lo que se piensa con intención de engañar. Lo extraordinario de este titular es la concentración: una infamia en dos tiempos.
Primero: “Es lógico que se entiendan la derecha vasca (el PNV) y española (el PP)”. Todo el mundo sabe, y Pastor no puede desconocerlo, que en las últimas elecciones autonómicas celebradas en Euskadi el 1 de marzo de 2009 se configuró un parlamento vasco compuesto como sigue: PNV, 30 escaños; PSE, 25 escaños; PP, 13; Aralar, 4; Eusko Alkartasuna, 1; Ezker Batua, 1; UPyD, 1.
Si la derecha vasca y española de esa imprecisa categoría conceptual que maneja Pastor estuvieran unidas por la lógica del portavoz, ahora estaría Gobernando Ibarretxe con el apoyo del PP. No es escandaloso que Pastor mienta, pero sí debería mover a escándalo la estupidez de su mentira.
Segundo: “El PSE coincidirá con Bildu”. Precisa que antes, la izquierda abertzale deberá cumplir su label democrático, que es el equivalente a la gracia santificante para los antiguos réprobos, pero en la misma lógica que comprende el pacto entre la derecha vasca y la española, defiende la unidad de acción entre ¿dos izquierdas vascas? Ayer contábamos que quien, con mucha probabilidad será el próximo lehendakari, Arnaldo Otegi, no sabemos si con el voto del declarante, no manifestó ningún pesar a Pastor, ni a ningún otro parlamentario socialista, tras el asesinato de Fernando Buesa, que Bildu, al día de hoy sigue sin haber condenado ni uno solo de los asesinatos de ETA: ni el de Buesa, ni los de Enrique Casas, Fernando Múgica, Juan Mª Jáuregui, Ernest Lluch, Froilán Elespe, Juan Priede, Joseba Pagaza, Isaías Carrasco, ni los 849 restantes, por supuesto.
¿Qué une al partido de Pastor con estos tipos de Bildu? La superioridad moral que comparten los partidos de izquierda. Los de derechas se unen por intereses; nosotros, por ideales. Quizá esto permita comprender que una víctima del terrorismo, como Madina, sea mucho más duro en sus juicios sobre el PP que cuando habla de quienes lo mutilaron tan despiadada e irreversiblemente.
En cambio, la derecha… El 14 de mayo pasado, durante la campaña electoral, este mismo Pastor ya estableció su repelús respecto a su socio de Gobierno en un fascinante ejecicio de autoacusación implícita: “En cuanto (los del PP) abren la boca, se les ven las caries del franquismo.” Lo que, si bien se mira, equivale a decir: “Fíjense qué tipo de gente somos. No tenemos ningún escrúpulo en pactar con esta punta de franquistas si eso nos ayuda a gobernar”. Tengo escrito que Eguiguren acabaría bildunizando al PSE. ëste es el argumento. Si Borges hubiera llegado a ver esto, su Historia Universal de la Infamiatendría un ligero cambio: El atroz redentor no se llamaría Lázaro Morell, sino José Antonio Pastor.
Santiago González, santiagonzalez.wordpress.com, 12/12/11