ABC – 17/06/17
· Los socialistas inician hoy un cónclave en el que el líder no tendrá ninguna oposición.
Pocos se habrían atrevido a predecirlo hace apenas unas semanas. Pero a una de las etapas más convulsas de la historia del PSOE le seguirá uno de los Congresos Federales más plácidos que se recuerdan. Pedro Sánchez no tendrá problemas para confeccionar una Ejecutiva que ya tiene muy avanzada y que responderá únicamente a su criterio. Tampoco tendrá problemas para que el partido asuma el modelo de partido, los principios políticos y la estrategia que defendió durante la campaña de primarias. Aunque desde el equipo del secretario general se ha trabajado estos días para pactar alguna de las enmiendas y minimizar cualquier posible disputa.
En el cónclave que arranca hoy, Sánchez pretende lanzar el mensaje de que el PSOE se reconfigura como «única alternativa» al PP. En el equipo de Sánchez creen que las prioridades deben ser dos: reconstruir el partido a nivel orgánico y tejer alianzas en las instituciones para «revertir» las políticas del PP. El secretario general sabe que no depende de él la convocatoria electoral, papel que creen que solo corresponde al próximo presidente del Gobierno y en segunda derivada a Ciudadanos, si Albert Rivera se decidiese en algún momento de la legislatura a poner distancia con Rajoy.
Mensajes a PP y Podemos
Pero tampoco está dispuesto a promover una moción de censura y volver a fracasar en su intento de alcanzar la presidencia. «A corto plazo no lo veo», señaló ayer José Luis Ábalos, que será el próximo secretario de Organización del partido, cuando ayer se le preguntó por la posibilidad de plantear una nueva moción de censura tras el verano. «Esta semana acabamos de tener una, y hacía 30 años que no teníamos ninguna. A ver si vamos a pasar de 30 en 30 años a hacerlo de tres en tres meses», señaló Ábalos, que cree necesario estudiar si este tipo de iniciativas «ayudan o no», ya que consideró que «no es el instrumento más adecuado cuando no se trabaja convenientemente».
Y aunque el PSOE reivindicará en este congreso su distancia con el PP, combinará ese posicionamiento con no permitir que Podemos les marque la estrategia, ante las palabras de Pablo Iglesias en las que pedía a los socialistas que tendiesen la mano a su formación y a ERC. «La estrategia política del PSOE la marca el PSOE, no la marca ninguna otra fuerza política», dijo ayer Adriana Lastra en el Palacio Municipal de Congresos donde el PSOE celebra desde hoy el congreso federal.
La que será nueva vicesecretaria general de los socialistas insistió en que con la actual aritmética parlamentaria el único pacto que contemplan es el que incluya a Podemos y Ciudadanos, porque «toda España sabe» cuál es la posición del PSOE sobre los partidos independentistas. La número dos de Sánchez recordó que ese pacto «no fue posible en el pasado por los vetos entre ellos» y confió en «poder superarlo al menos día a día en las Cortes Generales a través de la política». En este punto la estrategia política no dista mucho de la que planteaba la Gestora tras la abstención, aunque Lastra limitó el entendimiento con el PP a las «grandes políticas de Estado, como la cuestión catalana». También se refirió a la colaboración en el marco del pacto contra el terrorismo yihadista que Rajoy y Sánchez suscribieron en febrero de 2015.
El cónclave se concentra en una extensa jornada en el día de hoy, donde los 1.035 delegados se dividirán en tres comisiones (política, economía y modelo de partido) para elaborar la que será la hoja de ruta de los socialistas. Pero la ausencia de contestación anticipa el resultado: un partido más a la izquierda en lo económico, que hará bandera de la plurinacionalidad en la cuestión territorial y que reforzará la figura del líder. La gestora que ha pilotado el partido estos meses no tendrá presencia, y los barones críticos no darán ninguna batalla. En el nuevo PSOE, el éxito o el fracaso solo serán achacables a Pedro Sánchez.
ABC – 17/06/17