EL PAÍS 22/06/17
· El cambio radical se produjo solo un día después de que el partido votase en la comisión de Exteriores a favor del tratado
Pedro Sánchez anula su viaje a Bruselas
El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, anuló ayer por la tarde el viaje que tenía previsto desde hacía días a Bruselas y no participará en la reunión de los líderes socialdemócratas previa al Consejo Europeo, al que asistirá el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. En el encuentro, organizado por el Partido Socialista Europeo, se tratarán cuestiones como las negociaciones sobre el Brexit, la cooperación en seguridad y defensa y los acuerdos comerciales.
Del apoyo que el PSOE había dado al tratado hasta ahora dan también idea las declaraciones que hizo el portavoz de los socialistas españoles, Ramón Jáuregui, en el Parlamento Europeo el día que se aprobó el acuerdo. “En el socialismo europeo ha habido algunas posiciones contrarias por razones de índole nacionalista-electoral o sectorial agrícola, por ejemplo. Pero estamos ante una decisión geopolítica. La izquierda tiene que asumir una agenda progresista de la globalización que pasa por la regulación”. La mayoría de los socialistas europeos, pese a sus reservas, apoyaron el tratado comercial con Canadá para trazar una clara línea de separación de posiciones de corte populista y nacionalista como las defendidas por el Frente Nacional de Marie Le Pen o por el propio presidente de EE UU, Donald Trump.El giro abrupto del PSOE tendrá su reflejo en la votación de la próxima semana en el Congreso de los Diputados, que deberá ratificar el tratado. Las reservas de la nueva dirección socialista al acuerdo comercial con Canadá coinciden con las de los sindicatos, cuyo apoyo ha sido relevante para la victoria de Sánchez en las primarias socialistas. También era de sobra conocida la oposición al tratado de Podemos, que en los últimos días había marcado este asunto como la prueba de que el giro de Sánchez a la izquierda tenía una base real.
Votación de Juncker
No es la primera vez que Sánchez marca distancias con los socialdemócratas europeos. Hace casi tres años, en julio de 2014, en su primera etapa como secretario general, ya ordenó que el PSOE se apartara de un acuerdo clave. En aquel momento, estableció que los eurodiputados socialistas votaran en contra del conservador Jean-Claude Juncker como presidente de la Comisión Europea, una decisión que suscitó malestar entre dirigentes socialistas españoles, que censuraron que el PSOE se descolgase del acuerdo de la mayoría de los socialdemócratas europeos.El equipo de Sánchez sostiene que el giro sobre el acuerdo comercial ya se anticipó en el 39º congreso del PSOE del pasado fin de semana. “La izquierda socialdemócrata no está en contra del comercio internacional pero lo quiere en condiciones y regulaciones que aseguren la universalización de derechos y con las protecciones sectoriales sensibles en cada caso”, decía una resolución. Lo cierto, sin embargo, es que el pasado martes los diputados que forman parte de la comisión de Exteriores del Congreso recibieron la orden de seguir votando a favor del tratado.Con el cambio de opinión, el PSOE se separa de Ciudadanos y del PP, que sí apoyan el acuerdo. El no al CETA lo encabezaron los socialistas franceses, junto a alemanes, belgas y polacos.