El PSOE negocia con el PSC darle voto propio en el Congreso

EL MUNDO 13/07/13

· Se le permitiría en los asuntos que «afecten al autogobierno» o tengan un «interés singular para Cataluña»

A las mismas puertas del Comité Federal del PSOE aún continuaban anoche las negociaciones entre los socialistas y el PSC para lograr alcanzar el «acuerdo de renovación de la articulación parlamentaria entre el PSC y el PSOE en el Congreso de los Diputados», según se titula el pacto. El PSC quiere tener la posibilidad de votar «diferente» al PSOE, y Alfredo Pérez Rubalcaba parece estar dispuesto a consentirlo.

El texto sobre el que se ha negociado, al que ha tenido acceso EL MUNDO, y que algunas fuentes apuntan como casi definitivo, establece: «En asuntos de particular importancia que afecten al autogobierno o presenten un interés singular para Cataluña, en los que exista una posición diferenciada de los diputados del PSC, una Comisión de Seguimiento será el órgano encargado donde se decidirá el voto».

De esta forma, el PSC se garantiza abrir la puerta a un voto propio en los asuntos que debatan en la Cámara Baja y que afecten a sus intereses políticos.

Dicha comisión de seguimiento estará configurada por los dos secretarios generales –el del PSOE y el del PSC–, dos miembros de sus respectivas ejecutivas y dos miembros del grupo parlamentario, en representación de cada partido.

Además, según este documento, el Grupo Socialista se denominará Grupo Federal Socialista, y el PSC tendrá un «subgrupo» que «se dotará de la estructura interna que considere conveniente», al margen del Grupo Parlamentario del PSOE.

También el PSC quiere tener voz propia, y aunque el PSOE no le cederá su tiempo cuando haya discrepancias en el voto, los socialistas catalanes parece que sí se han garantizado que, «en aquellos asuntos legislativos que afecten únicamente a la acción política del PSC, en nombre del conjunto del Grupo Federal Socialista intervendrá un diputado del PSC, independientemente de que su intervención sea en el pleno o en comisión».

Fuentes de la dirección federal indican que este acuerdo no implica que los socialistas catalanes tengan voz propia en el Congreso y que, en la práctica, ya se lleva haciendo así muchos años.

Pero, sobre todo, desde Ferraz se afirma que el acuerdo no está cerrado y que aún queda mucho que negociar con el PSC y, sobre todo, con el resto de federaciones, que tienen muchas reticencias a este acuerdo.

De hecho, según fuentes de toda solvencia de la dirección del partido, a última hora de la noche de ayer no estaba aún claro si la aprobación de ese protocolo –que sólo sería en estrictos términos parlamentarios, no orgánicos– se iba a incluir en el orden del día del Comité Federal de hoy.

«Si no llegamos a un consenso, lo dejamos para más adelante», afirmó un importante dirigente de la dirección federal.

Todo ello lo explicará a primera hora de la mañana de hoy el líder socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba, que ha decidido por primera vez en su etapa al frente del PSOE que su intervención ante el máximo órgano del partido sea en abierto, «ante la gravedad de la situación política», según explicaron fuentes socialistas.

Por otro lado, la Ejecutiva Federal del partido aprobó ayer la ponencia de cara a la Conferencia Política, así como dio el visto bueno al sistema exploratorio de los socialistas gallegos para que los ciudadanos puedan elegir a su candidato a secretario general, aunque sea en una consulta no vinculante.

Además de la polémica con el PSC, hoy se espera que en el Comité Federal sobrevuele el fantasma de las fechas de las primarias –aunque Óscar López ha repetido que no se reglamentarán hasta el siguiente Comité Federal, y siempre después de la Conferencia Política de noviembre– y el debate sobre si el PSOE debe dar el paso para presentar una moción de censura contra el Gobierno.

Sobre el primer asunto, el ex alcalde de San Sebastián Odón Elorza pidió ayer primarias antes de las elecciones europeas de mayo de 2014, y dijo que su petición venía avalada por un grupo de militantes. En cuanto a la moción de censura, hasta Alfonso Guerra se mostró ayer favorable.

EL MUNDO 13/07/13