ABC – 03/10/15
· Desbandada de Ahora en Común después de que Garzón se volcara en la plataforma.
· La izquierda se presentará divida a las elecciones generales. Al calor del éxito de las candidaturas municipalistas crecieron las voces que pedían recomponer el históricamente desmembrado puzle de la izquierda —sin el PSOE— para concurrir unidos a los comicios generales.
Podemos, que se vio en las encuestas con un 23,9 por ciento del voto el pasado enero, ha ido poco a poco perdiendo popularidad, hasta un modesto 15,7 por ciento. El objetivo fue en ese momento repetir ese esquema de confluencia, y «sumar para multiplicar» con la aritmética electoral. Los politólogos sitúan el umbral de la «fortuna electoral» entre el 16 y el 17 por ciento de los sufragios. Es a partir de esa cifra cuando la ley electoral comienza a multiplicar los apoyos y a «vender más baratos» los escaños. Pero ya entonces había un actor en juego del que Podemos recelaba y que no estaba dispuesto a añadir al puzle: Izquierda Unida.
La histórica formación atravesaba sus horas más bajas y se agarró a la confluencia para arrimarse a Podemos. Desde el partido de Pablo Iglesias, advertían de que no iban a ser «la tabla de salvación de nadie». Empezaba así un pulso entre las dos formaciones que ha acabado por desmembrar cualquier posibilidad de unidad a tres meses de las elecciones generales.
Ahora en Común
La plataforma Ahora en Común (AeC) nació para presionar a los partidos, especialmente a Podemos, para la pretendida «unidad popular» de la izquierda. Buscaba esa confluencia a sabiendas de que Podemos –que tenía su objetivo en el votante socialista– no quería oír hablar de un «frente de izquierdas». Desde la formación morada, que ya había repetido por activa y por pasiva que no iba a pactar con IU, acusaron a la nueva plataforma de ser una maniobra de Izquierda Unida. En la presentación de AeC participó la exmilitante del PSOE Beatriz Talegón. «Me invitó Alberto Garzón», el candidato de IU a La Moncloa, indica Talegón, que se desvinculó del proyecto. «Es un puente de plata para que IU entre en Podemos».
A mitad de verano, Garzón anunció que concurriría a las primarias de AeC, diluyendo en ella las siglas de IU, en lo que parte del partido entendió como la forma en que el Garzón facilitaba su desembarco en Podemos. Fuentes cercanas a la negociación aseguran a ABC que los dos líderes ya tenían cerrado el pacto incluso antes del verano.
El pasado domingo, varios promotores de AeC emitieron un comunicado en el que anunciaban que abandonaban el proyecto. «Hemos ido conociendo los acuerdos y desacuerdos que, a puerta cerrada, se han ido haciendo entre fuerzas de izquierda y Podemos a fin de ocupar los huecos o puestos de consolación que esta formación parece ofrecer», indicaban. Podemos ya había dejado atados a sus candidatos en un cuestionado proceso de primarias y anunció que abriría huecos en sus listas para otras «plataformas ciudadanas». «Si IU estuvo detrás de AeC de manera encubierta en sus inicios, lo desconocemos. Pero no era la intención», asegura Pilar García, una de las promotoras. «Está claro que Podemos no ha querido confluir e IU nos utiliza como campo de batalla de sus luchas internas y en su pulso con Iglesias».
Equo, cuyo candidato a La Moncloa, Juantxo López de Uralde, había participado activamente en la promoción de AeC junto a Garzón, anunció el pasado jueves que renunciaba a participar en las primarias. Las negociaciones por la confluencia «van a un choque de trenes entre Iglesias y Garzón», asegura Uralde, que deja solo al de IU en el proyecto. Tras el fracaso en las elecciones catalanas, donde la candidatura de Podemos, ICV y EUiA (Cataluña sí que es Pot) obtuvo peores resultados que ICV en solitario, IU, hasta entonces parte débil de las negociaciones, se consideró legitimada para tensar la cuerda. Garzón aseguró que Podemos había monopolizado la campaña catalana restando visibilidad a IU. Fuentes cercanas a Garzón aseguran que, de llegar a un acuerdo con Podemos, las candidatos de AeC tendrían que figurar como independientes, y eso es como «no ser nada».
Otro punto de discrepancia es el puesto que Podemos cedería a Garzón. Desde IU aseguran que no renuncian a concurrir por Madrid. Mientras de puertas para afuera Garzón repite que, si no se llega a acuerdo, competirá con Podemos en las generales, las mismas fuentes aseguran que la relación de los dos líderes sigue siendo fluida. IU celebra hoy un Consejo Político en el que volverán a visualizarse las dos posturas enfrentadas: confluir en torno a Podemos o hacerlo con otros actores, como el que pretende impulsar Gaspar Llamazares, de Izquierda Abierta, junto a Talegón y el exjuez Baltasar Garzón. Sin acuerdos, podría consumarse una escisión en IU. Para más inri, el 4 de septiembre se registró otro nuevo partido: Unidad Popular en Común.
ABC – 03/10/15