Editorial en ABC, 14/7/2011
ETA no desaprovecha ninguna oportunidad, ni el «proceso de paz» ni la sentencia del Tribunal Constitucional, para llevar su estrategia política a sus últimas consecuencias
EL comunicado de ETA publicado por «Gara» es un ejercicio práctico de la teoría de vasos comunicantes de la banda terrorista con la izquierda abertzale. Por este procedimiento, a menor capacidad operativa de los terroristas, mayor es el protagonismo de la izquierda abertzale; y a mayor intensidad de la violencia, menor presencia de Batasuna. Ahora toca la primera opción, porque, en efecto, ETA está débil, pero por esto mismo ha transferido el peso de su estrategia a Bildu, jugándoselo todo a la carta del Constitucional. Y como ganó Bildu, gana ETA, reforzada por los efectos diferidos de un «proceso de paz» que alcanza su mayor grado de indignidad al conocerse el auto que procesa al ex director general de la Policía, al jefe superior de la Policía en el País Vasco y un inspector —dependientes todos del actual ministro de Interior, Antonio Camacho, y del candidato socialista, Pérez Rubalcaba— de los delitos de colaboración con banda terrorista, revelación de secretos y encubrimiento.
Tras beneficiarse de las trampas de un «proceso de paz» cuyos detalles tendrá que aclarar la Justicia, los terroristas consideran que en las elecciones del 22 de mayo se «ha ganado la batalla política e ideológica de la ilegalización». Con la sentencia del TC sobre Bildu, y sin necesidad de atribuir a sus magistrados juicios políticos de intenciones, la estructura legal construida sobre la Ley de Partidos Políticos se ha venido abajo. ETA se jacta de lo mismo que denunciaban los informes policiales y el anterior ministro del Interior: Bildu está en su estrategia. Por tanto, ETA no dijo ayer nada que no hubiera manifestado en los meses previos a la creación de Bildu. De hecho lo reconoce en su comunicado, al relatar todas las iniciativas de la izquierda abertzaley de la propia ETA que han desembocado en este escenario. Pero el problema es que para el TC lo que ETA dijo y ahora vuelve a decir sobre Bildu no es más que «conductas ajenas» a esta coalición, que el Supremo calificó como mera prolongación de ETA/Batasuna. El blindaje legal dado por el TC a Bildu es inexplicable.
ETA no da un paso más en su último comunicado, porque no necesita darlo. Bildu controla Guipúzcoa, es la primera fuerza municipal vasca y lidera el nacionalismo. Y todo esto lo ha conseguido ETA al mismo tiempo que la Ley de Partidos Políticos se venía abajo y el Estado dejaba escapar la oportunidad de acabar, esta vez sí, con la banda terrorista. Su comunicado omite cualquier referencia a un cese definitivo e incondicional de la violencia. Tampoco menciona a las víctimas para pedir su perdón. Por el contrario, no fue casualidad que el comunicado se diera a conocer en el aniversario del asesinato de Miguel Ángel Blanco. Como si fuera un aviso para incautos y tontos útiles, ETA se ha presentado como tutor del éxito de Bildu y se ríe de todos los españoles.
Editorial en ABC, 14/7/2011