ABC 23/12/12
Elena Valenciano a ABC: «Nunca hemos pensado hacer un PSOE catalán».
Alfredo Pérez Rubalcaba pronosticaba el jueves por la mañana a los periodistas en el Congreso que la ofensiva soberanista de CiU-ERC irá in crescendo en los próximos meses. Lo que no imaginaba es que, esa tarde, su socio catalán, el PSC, iba a anunciar tolerancia parlamentaria con la consulta independentista, propiciando con ello que el PSOE tenga cada vez más difícil explicar en el resto de España por qué colabora en la ruptura; ni siquiera para votar finalmente «no», como se justifica el PSC.
La Dirección Federal socialista sabe que abstenerse en decisiones de soberanía que se voten en el Parlamento Catalán, para no poner «palos en las ruedas», según argumentó Pere Navarro, acentúa las contradicciones internas y torpedea el «federalismo» que se pretende oficializar en la Conferencia Política de otoño, a modo de tercera vía entre CiU-ERC y el PP: Para los primeros, independentistas, será claramente insuficiente; y los populares no querrán oír hablar de ir a un modelo federal en estas circunstancias.
Por eso, el PSOE ha decidido poner distancia con su socio catalán. El primero en reaccionar, el viernes, fue el coordinador de la ponencia nombrada por el Consejo Territorial, el andaluz José Antonio Griñán, quien advirtió que el PSOE rechaza cualquier «referéndum que plantee soberanismo, independencia o autodeterminación».
En Ferraz no se oculta el malestar por el fondo, pero también por la forma en que se ha conducido Navarro. Rubalcaba y los suyos tenían muchas esperanzas puestas en que embridaría el alma más «catalanista» del PSC, pese a lo cual, la vicesecretaria general, Elena Valenciano, desveló el viernes que Navarro no «consultó» con Rubalcaba la decisión de abstenerse en el Parlamento Catalán.
Vara no descarta nada
Por primera vez en muchos meses, en lugar de poner paños calientes para no alimentar la reconocida «discrepancia» con el «derecho a decidir» que abandera el PSC, Valenciano habló claro: el referéndum es un «desastre». De momento, el episodio ha llevado al «congelador» sine die el protocolo de relaciones entre ambos partidos. Y es que, la jugada de Navarro pone en un aprieto a Rubalcaba, que ha tenido que emplearse a fondo en sus conversaciones con varios secretarios generales de federación para convencerles de que al PSOE no le conviene romper con el PSC y presentarse en lo sucesivo a las elecciones con la sigla nacional. En conversación con ABC, Elena Valenciano aseguró ayer, rotunda: «Nunca hemos pensado hacer un PSOE catalán», un debate recurrente durante 35 años de tormentoso pacto.
De hecho, el extremeño Guillermo Fernández Vara afirmó el pasado 30 de octubre en La Sexta que «estamos en un momento en que nada es descartable» en las relaciones entre PSOE y PSC. Fuentes próximas a Vara consultadas ayer por este periódico señalaron que el secretario general de los socialistas extremeños sigue teniendo dudas de que sea conveniente mantener la alianza en estas circunstancias políticas.
ABC 23/12/12