ABC 03/05/17
· Con ese apoyo Puigdemont hará una «última» oferta para pactar la consulta
El presidente de la Generalitat ya sabe el número de firmas con las que pedirá formalmente, en una fecha aún sin concretar, pactar la celebración de un referéndum de autodeterminación con el Gobierno: 400.000. Joan Ignasi Elenna, presidente del llamado Pacte Nacional pel Referéndum, dio ayer a conocer el balance de la campaña de recogida de apoyos para solicitar la consulta, una cifra importante pero mucho menor por ejemplo que las cifras de asistencia, oficiales o facilitadas por la organización, de las últimas movilizaciones de la Diada del 11 de septiembre.
Elena explicó en cualquier caso que se trata de una cifra «extraordinaria», y que previsiblemente se incrementará, ya que no cuenta los apoyos recogidos desde el día de Sant Jordi (23 abril) y la recopilación de firmas sigue abierta. El Pacte Nacional pel Referéndum es el intento del presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, por ampliar la base de apoyo soberanista, y de hecho, además de los partidos estrictamente independentistas, cuenta con el concurso de los «comunes» de Ada Colau, los sindicatos y otras organizaciones sociales.
Precisamente para lograr esas adhesiones, el manifiesto aboga por un referéndum pactado, y en ningún caso apunta hacia la unilateralidad que la mayoría secesionista en el Parlament defiende ahora en caso de que, como se ha anunciado, el Estado no autorice la consulta.
Con las firmas que se recojan, Puigdemont solicitará formalmente al Gobierno sentarse a negociar la consulta, una demanda formal de la que aún se desconoce el formato. Lo que sí deja claro el gobierno catalán es que la única negociación posible es sobre cómo se realizará la citada consulta. El referéndum «sigue siendo nuestro Plan Ay B», apuntó ayer la portavoz de la Generalitat, Neus Munté. Para Puigdemont, será la «última oferta» de negociación que presente al Gobierno antes de tirar por la calle de enmedio.
Las firmas recogidas hasta el pasado 23 de abril son muchas, aunque no tantas si se comparan con las manifestaciones de la Diada desde que el 11 de septiembre de 2012 comenzasen las grandes movilizaciones. En la de ese año, por ejemplo, los organizadores hablaron de dos millones de asistentes, 600.000 según los cálculos de la Delegación del Gobierno, cifras más o menos similares, aunque en la última convocatoria se fue a la baja, de las «diadas» sucesivas.
Donativos al PDECat
Por otra parte, el PDECat comenzó ayer una campaña de recogida de donativos para pagar las multas y gastos judiciales derivados de los casos judiciales abiertos contra los encausados por la consulta soberanista del 9N. Según indicó el partido en un comunicado, la campaña tiene como primer objetivo apoyar económicamente al expresidente Artur Mas y a los exconsellers Francesc Homs, Joana Ortega e Irene Rigau, todos ellos inhabilitados por haber organizado la consulta del 9N.
Los recursos de la campaña servirán para hacer frente a las multas que se les impusieron en las respectivas sentencias, pero también para las posibles sanciones que en el futuro se puedan imponer a los miembros de la Mesa del Parlament, que también están siendo investigados por desobedecer al Tribunal Constitucional (TC).