EL CORREO 20/12/13
· La decisión última recae en la Audiencia Nacional, que da por finiquitados casi todos los recursos de presos de la banda
El Tribunal Supremo ha solicitado a la Audiencia Nacional que liquide el alargamiento de condena impuesto por la ‘doctrina Parot’ a la histórica disidente de ETA Carmen Gisasola. Con este último paso, el alto tribunal da casi por extinguida la aplicación de este cómputo de penas con carácter retroactivo, cuando se cumplen dos meses desde que la Corte de Estrasburgo diera la razón a la reclusa Inés del Río y anulara este mecanismo.
Icono de la llamada ‘vía Nanclares’ y miembro del autodenominado colectivo ‘Presos comprometidos con el irreversible proceso de paz’, Gisasola fue condenada a más de 90 años de cárcel por varios atentados en los que murieron tres personas. En la actualidad, cumple su pena en Zaballa en régimen de segundo grado, lo que le permite disfrutar de dieciocho días fuera de la cárcel en cada semestre del año. La previsión de que la Audiencia Nacional –tal y como ha sucedido con el resto de recursos– responda de forma afirmativa a la petición del Supremo no se traducirá en su excarcelación.
A diferencia de otros reclusos que tenían aplicada la ‘doctrina Parot’, la exjefa de los comandos de ETA deberá permanecer en prisión al quedarle por cumplir parte de su condena. Eso sí, la Audiencia Nacional deberá poner fecha a su progresión al tercer grado o semilibertad y a la finalización de la pena. Los abogados de la exmiembro de ETA podrían solicitar su libertad condicional, algo que, de serle concedido, no se haría realidad hasta dentro de «varios meses».
Desde que la Justicia europea tumbara la aplicación de esta doctrina, han sido más de sesenta los presos excarcelados –unos 58 de ETA–. Carmen Gisasola ha sido, por ahora, la última en sumarse a la lista de los reclusos disidentes de la banda terrorista que se han visto beneficiados por la sentencia de Estrasburgo. Una lista que se abrió en noviembre con la excarcelación de Andoni Alza, al que le siguieron otros como Iñaki Rekarte, José Arizmendi y Luis María Lizarralde. Además, se extinguió la responsabilidad penal de José Manuel Fernández Pérez de Nanclares, que ya se encontraba en libertad condicional, y de Fernando Luis de Astarloa.
Cabe recordar que el pasado 22 de noviembre Gisasola y Alza asistieron por primera vez al homenaje a una víctima de ETA. Se trató del acto en memoria del sargento mayor de la Ertzaina Joseba Goikoetxea. Ese mismo día, Iñaki Rekarte participó en una jornada organizada por la Fundación Fernando Buesa sobre la construcción de la convivencia. Rekarte compartió mesa con Iñaki García Arrizabalaga, cuyo padre murió a manos de los Comandos Autónomos Anticapitalistas.
Faltaría aún por conocer en qué situación quedaría otro histórico de la ‘vía Nanclares’, Joseba Urrosolo Sistiaga. En prisión desde 1997, fue sentenciado a 449 años de prisión por 16 asesinatos y dos secuestros.
Según las previsiones
La previsión de la Audiencia Nacional para culminar el proceso de excarcelación de todos los presos –al menos, los de ETA– se situaba desde un principio antes de navidades. Y todo apunta a que será así. Fuentes del alto tribunal daban ayer casi por finalizado el proceso. Los últimos dictámenes se han producido casi de forma automática. A diferencia de los primeros casos, no fue el pleno el que se reunió para ordenar la excarcelación sino las propias secciones que condenaron a los terroristas –la Segunda y la Tercera–, lo que supone un trámite mucho más ágil.
Horas antes de la petición sobre Gisasola, el Supremo solicitó también al alto tribunal que liquidara las penas de los presos de la banda Andoni Cabello y José Ignacio Echeverría. Así, mientras este último ha sido ya puesto en libertad, Cabello verá reducida su condena, si bien es probable que no abandone la prisión hasta 2019. Detenido el 9 de febrero de 1991 por agentes de los GEO a raíz de la desarticulación del ‘comando Goiherri-Costa’, Cabello fue condenado por su pertenencia a este comando, así como por planear, junto a María Josefa Uzcuden y Miguel Ángel Ascasibar, la colocación de un artefacto explosivo al paso de una patrulla de la Guardia Civil. Más tarde acumuló otras seis causas penales por acciones terroristas.
En aplicación del fallo de Estrasburgo contrario a la ‘doctrina Parot, el pasado miércoles fue excarcelada asimismo Concepción González Rodríguez. Miembro de los GRAPO, había sido condenada por el secuestro del empresario Publio Cordón.
Por otro lado, la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional ha decidido otorgar al preso disidente de ETA Rafael Caride Simón un permiso de cuatro días. El recluso fue uno de los autores materiales del atentado contra Hipercor, en Barcelona, que costó la vida a una veintena de personas en 1987. Su condena por este atentado y otros diez ataques ascendió a 790 años. El alto tribunal estima que Caride Simón, quien ha sobrepasado una cuarta parte de su condena, es un «modelo» de reinserción, que ha «evolucionado en clave de humanidad» por «motivos sinceros».