Santiago González, EL MUNDO, 16/4/12
Babia es una comarca de León que linda con Asturias, un hermoso valle al que los reyes leoneses de la Edad Media se retiraban para cazar y descansar. Cuando alguien preguntaba por el monarca, la respuesta obligada era «su majestad está en Babia», expresión que ha llegado hasta nuestros días con un significado no ejemplarizante.
El miércoles pasado la prensa española daba noticia del accidente del nieto mayor delRey,que se pegó un tiro en el pie en la finca que su padre tiene en Soria. Este diario abrió con la expresión asustada del niño: «El abuelo se va a enfadar mucho». Santa inocencia. El abuelo debió de pensar allá en Botsuana: «De raza le viene al galgo».
Resulta que el Rey se ha ido al sur de África en compañía no idónea durante la semana más negra de la economía española, con la prima de riesgo disparada hacia la intervención y la presidenta argentina desbocada hacia la expropiación. Viene a decir Wittgenstein (Ludwig Josef, que era filósofo y de la rama austriaca de su familia) en su Tratado Lógico-Filosófico que todo lo que se puede decir se debe decir de manera clara y que, si hay algo de lo que no se puede hablar, hay que callarse. Ella era otra Wittgenstein. Esos son otros López, que se dice en los ambientes plebeyos.
Y se ha ido a cazar elefantes. El único ministro que le dimitió a Zapatero fue Bermejo por una aventura cinegética equivocada. La caza es delito de lesa Humanidad, la única razón que podía costarle el cargo. Si era políticamente inaceptable que el ministro de Justicia se cargara al papá de Bambi aún es peor que el monarca dé chicharrón al de Dumbo.
La Reina se fue a celebrar la Pascua ortodoxa con su familia a Atenas. El Rey no puso fin a su safari por el accidente de su nieto y Doña Sofía no interrumpió su visita a la familia por el accidente de su marido, váyase lo uno por lo otro. Babia estaba esta semana en Botsuana y a ver quién nos dice a la luz de estos faroles que España no es Grecia.
Hay alguna circunstancia más que va a cargar de significantes esta crisis. El próximo 14 de mayo los Reyes de España cumplen sus bodas de oro. Por si esto fuera poco, 11 días después se celebrará en Madrid la final de la Copa del Rey, con las aficiones del Athletic y del Barça garantizando bronca, como en la final de Valencia. Es la teoría de los marcos de Lakoff, recogida en un librito entretenido, No pienses en un elefante. Un día les hizo esa petición a sus alumnos y ninguno pudo sustraerse. El elefante es un animal tan rotundo, tan excesivo en sus apéndices que es imposible escapar al marco que define. Y el Rey se ha ido precisamente a cazar elefantes.
El 25 de mayo, en la final de la copa que lleva su nombre, puede que vaya a entregar el trofeo o que la rehabilitación de su cadera se lo impida. En cualquiera de los dos casos, algunos miles de hinchas mirarán hacia el palco presidencial del Manzanares para ver dibujado con toda nitidez el ele- fante de Lakoff, con sus orejotas, su trompa, sus colmillos, esas patazas y sus cuatro toneladas. Hoy Babia es territorio Imserso. Para vivir en Babia hay que abdicar, que es la forma de prejubilación que les cumple a los monarcas.
Santiago González, EL MUNDO, 16/4/12