EL MUNDO 01/05/14
· Es la primera vez que el CIS catalán pregunta acerca de la consulta del 9-N.
En el caso hipotético de celebrarse la consulta soberanista orquestada por el Govern el próximo 9 de noviembre, el apoyo a un futuro Estado catalán apenas rozaría la mitad de los votos. En concreto, un 47,1% de los catalanes optaría por el doble sí a sus dos preguntas –¿Quiere que Cataluña sea un Estado? En caso afirmativo, ¿quiere que sea independiente?–, según se desprende del barómetro electoral de la Generalitat, el primero que pregunta abiertamente sobre el referéndum.
Según los resultados desgranados, un 57,6% de los catalanes votaría sí a la primera pregunta, la de si Cataluña debe ser un Estado. De éstos, un 81,8% secundaría la independencia en la segunda cuestión, lo que dibuja un panorama de apoyo global a la ruptura del 47,1%.
Esta cifra no llega ni a la mitad del electorado teniendo en cuenta que la Generalitat no ha incluido el porcentaje estimado de gente que acudiría a las urnas. «El independentismo no pierde fuelle», aunque «también es verdad que no crece más», reconoció el director del Centro de Estudios de Opinión de la Generalitat, Jordi Argelaguet.
En este hipotético escenario, los que rechazan de forma frontal la independencia representan el 19,3% del electorado, mientras que el 10,9% de los encuestados no acudiría a las urnas. Entre los opositores a la secesión hay que sumar el 8,6% de partidarios de la llamada tercera vía, basada en una reforma de la Constitución en clave federal. Es decir, que votarían sí en la primera pregunta pero se opondrían a la opción independentista de la segunda.
Sorprende comprobar que la mayoría de los encuestados socialistas, el 38,8% del total, se decantaría por un no en primera instancia sin tan siquiera contemplar la vía federal del PSC. También la opción del doble sí por parte de la mayoría del electorado de Iniciativa, un partido que secunda el derecho a decidir aunque nunca se ha posicionado a favor o en contra de la independencia.
Según el sondeo, los motivos para dar respaldo a la secesión poco tienen que ver con la identidad catalana y mucho con la economía. También es significativo que casi la mitad de los encuestados, el 44,6% del total, creen probable que Cataluña quedara automáticamente fuera de Europa en caso de independizarse.
En clave electoral, CiU y ERC empatarían como fuerzas más votadas en los comicios europeos, con un 20% y un 20,1% de estimación de voto respectivamente, seguidas del PSC (16,9%), PP (12,1%), ICV (11,3%), Ciutadans (9,9%) y UPyD (2,2%). CiU, con 35-36 escaños, ganaría las elecciones al Parlament por delante de ERC (34-35), mientras que Ciutadans rivalizaría por la tercera plaza con PSC e ICV. En caso de elecciones generales, se seguiría el mismo orden con CiU a la cabeza (14-15 diputados) y ERC, segunda (11-12).
EL MUNDO 01/05/14