ABC 17/11/16
ENTREVISTA Vaira-Vike Freiberga Expresidenta de Letonia
La ajetreada historia de Letonia durante el siglo XX marcó su presente. La expresidenta Freiberga recordó ayer en Madrid los desafíos a los que ahora se enfrenta el país báltico, independizado de la Unión Soviética en 1991 y miembro de la Unión Europea y la OTAN desde 2004.
P—¿Considera que Donald Trump puede debilitar la OTAN?
R—Cuando Trump afirma que los países de la OTAN deben invertir en defensa, todo el mundo está de acuerdo. Pero cuando dice que, si un país es atacado hay que mirar las inversiones en su defensa antes de intervenir, hay que recordar que eso no está en el Tratado. Necesita recibir información fundamental que no posee.
P—¿Teme la nueva relación bilateral entre Estados Unidos y Rusia?
R—No. Porque la personalidad de Trump y Putin no permite que cambien sus posturas. Tendrán que encontrar un equilibrio. Si no, se va a convertir en una competición entre machos alfa.
P—¿Qué significa la OTAN para un país como Letonia?
R—Letonia es un pequeño país que no es capaz de defenderse solo, y que no puede ser neutral. Así que un acuerdo con la OTAN, que defiende los valores democráticos y la independencia de los países, es una solución ideal.
P—Obtuvieron la independencia tras la Primera Guerra Mundial.
R—Sí, con sangre y batallas. Pero en ese momento fue posible por el hundimiento de los imperios. Y luego recuperamos la independencia cuando la Unión Soviética se rompió. Esperamos no tener que luchar de nuevo.
P—Usted era una niña cuando se firmó el pacto Ribbentrop-Mólotov entre la Alemania nazi y la URSS.
R—Recuerdo estar con mi madre en la calle. Me impactó un grupo de personas con la bandera roja, seguido de otro que elevaba el puño. Había gente contenta. Otros lloraban. Mis padres, tras el año de comunismo, con el sistema de deportación y de propaganda, decidieron huir.
P—Eso pasó en 1945. ¿Cómo fue su vida posterior como refugiada?
R—Tuve que desarrollar un sentido de la identidad. Y encontrar cómo adaptarme. En mi caso, aprendiendo el idioma del país muy rápido, para comunicarme y comprender la cultura, y al mismo tiempo recordando que venía de otro lugar, que tenía otra herencia.
P—Letonia es un país donde conviven varias etnias y religiones.
R—El 27% de la población de Letonia es rusa. Llegaron en la era soviética. Solo había un 9% antes de la guerra.
P—¿Cómo consigue esa población rusa la ciudadanía letona?
R—Los rusos que llegaron tras la primera ocupación tienen que pasar un test de conocimiento mínimo de letón, la lengua oficial, conocer el himno nacional y saber que Letonia es una república parlamentaria.
P—Tras independizarse de la URSS, ¿cuáles fueron los desafíos?
R—Instalar una democracia al tiempo que la economía estaba en crisis.
P—Y la entrada en la UE en 2004, ¿qué supuso para su país?
R—La consagración de pertenecer a Europa. Somos parte de ella, y también de los sistemas democráticos.
P—¿Qué espera para Letonia?
—Seguir independientes. Y que en cada generación pueda trabajar para vivir como individuos libres.