CARLOS SEGOVIA – EL MUNDO – 25/06/16
· «A la incertidumbre económica y financiera que implica el Brexit hay que añadir la derivada de la actual situación política en Europa con importantes elecciones este año, empezando por las de este domingo en España», afirmó ayer Jean-Michel Six, el economista jefe para Europa de la agencia estadounidense Standard & Poor’s. Tras haber tenido que pedir el bochornoso rescate bancario en 2012 y rondado tener que solicitar el total como Grecia o Portugal, España vuelve a estar bajo el foco de los mercados.
La repetición de elecciones generales fue muy negativa para la economía española, pero el daño se acentúa ahora que se producen tras la hecatombe británica y, además, con perspectiva de que pueda haber unos terceros comicios. En un momento de pánico inversor, presentarse como un país de Gobierno incierto es una credencial especialmente perjudicial para un país que sigue teniendo más del 20% de paro y que debe convencer al mundo de que es capaz de devolver una deuda del 100% de su Producto Interior Bruto sin haber resuelto aún uno de los mayores déficits de la Eurozona.
De momento, el coste de financiación de las empresas españolas –importante variable para que no destruyan empleo– ya es más caro desde el resultado británico y puede serlo aún más tras el 26-J.
El Gobierno aprovechó ayer para apuntalar las opciones del PP de ganar las elecciones presentándose como el único bastión para evitar males mayores. El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, se quedó a medio milímetro de aprovechar un acto institucional en La Moncloa para pedir el voto: «Una contingencia externa como ésta hace tan sólo unos años, podría haber precipitado a España a la quiebra o al rescate. No es este ahora el caso».
«En estas circunstancias es especialmente relevante generar confianza y credibilidad y tener un Gobierno con estabilidad y la agenda económica correcta», remachó también en La Moncloa el ministro de Economía, Luis de Guindos. Éste no ocultó ayer el riesgo de «efecto dominó». Si un país del euro, como Holanda, muestra que puede seguir la estela de Reino Unido y deja no ya la UE sino la Eurozona, el efecto para la economía española sería letal, porque es especialmente vulnerable sin blindaje europeo.
De momento, el Ibex cayó ayer más que el Eurostoxx y otros índices bursátiles europeos, incluido el de Irlanda, mucho más expuesto a la crisis británica. En la caída general se entiende la de International Airlines Group (IAG), matriz de British Airways y de Iberia, pero que bancos muy afincados en España como Bankia o CaixaBank cayeran en torno al 20% es inquietante.
Es fundamental que España participe en primera línea de la reacción europea, ya que está en la primera línea también del foco de los mercados. Hoy empieza mal, porque el ministro alemán de Exteriores,Frank-Walter Steinmeier, ha convocado en Berlín a sus homólogos de los seis países fundadores de la UE, pero no a José Manuel García Margallo.
Angela Merkel,ha citado para el lunes a una minicumbre al presidente francés, François Hollande, y al primer ministro italiano, Matteo Renzi. Fuentes de Moncloa recuerdan que Rajoy tiene que presidir ese día el Comité Ejecutivo del PP tras el resultado electoral. No obstante, confirman que se entrevistará con Merkel el martes en reunión bilateral antes del Consejo Europeo en Bruselas. El presidente pedirá a la canciller un maximo blindaje del euro para evitar dudas que contagien a países como España. Por si fuera poco, el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, dijo ayer que el Brexit muestra que es posible ejercer soberanía, cuando, por el contrario, quedó acreditada la tormenta que sacudiría a Cataluña y toda España en caso de referéndum de autodeterminación.
En un análisis para inversores el banco italiano Unicredit apuesta que el Brexit puede tener el efecto al menos de contener a Pablo Iglesias. «Puede disuadir a los indecisos a votar a los partidos tradicionales más moderados o a Ciudadanos (…) quizá el PSOE pueda conservar su segundo puesto y Ciudadanos, erosionar voto antisistema a Podemos».
De momento, Goldman Sachs anunció «una revisión» de sus previsiones sobre los países europeos y que sus primas de riesgo sufrirán. Si el resultado del 26-J es inestable, el único salvavidas será la determinación de Merkel y del BCE para blindar la Eurozona, que, como bien sabe Alexis Tsipras, nunca es gratis.
CARLOS SEGOVIA – EL MUNDO – 25/06/16