EL MUNDO 11/01/15
· Interior confirma que se hacen más captaciones en la Red que en las mezquitas y que IS recluta a más jóvenes que Al Qaeda
2014 se salda con la captura de 47 yihadistas en una docena de operaciones. Además, se ha detenido a una decena de retornados de zonas de conflicto. La Policía ha detectado cómo los radicales captan más adeptos por las redes sociales que en las mezquitas, y como el IS recluta más jóvenes que Al Qaeda.
Han sido casi medio centenar los detenidos por las Fuerzas y Cuerpos de la Seguridad del Estado durante el finalizado 2014 por su presunta implicación en tramas de terrorismo islamista. Según los datos oficiales del Ministerio del Interior, entre ellos se encuentra casi una decena de retornados, de terroristas que regresaban a España procedentes de zonas de conflicto como Siria o Mali.
Durante el pasado año, las actuaciones policiales han cercenado numerosas células de captación, dedicadas a buscar y lavar el cerebro de futuros integrantes de tramas terroristas.
Una de las novedades con las que se han encontrado los especialistas respecto a años anteriores ha sido la irrupción de mujeres en España que trataban de viajar a las zonas de conflicto para incorporarse a las filas del autodenominado Estado Islámico o para convertirse en esclavas sexuales de los integrantes de esta trama terrorista. La actuación policial lo impidió. En 2014, además, los especialistas en la lucha contra este fenómeno también han continuado presionando a los que se dedican a exaltar a los terroristas y sus atentados. Es otro de los pilares de la lucha policial del curso que se acaba de cerrar, que se saldó con 12 operaciones contra el terrorismo yihadista; muchas de ellas, con la colaboración fundamental de Marruecos.
RETORNADOS
Una de las primeras actuaciones sobre retornados, aquéllos que han estado en países en conflicto combatiendo y regresan a España, se produjo nada más comenzar el año pasado, el 5 de enero, en el aeropuerto de Málaga. Abdalouahid Sadik Mohamed, 30 años, español pero con ascendencia marroquí, había salido de Ceuta y, tras recibir entrenamiento en Siria por parte de Al Qaeda, fue seleccionado para participar en una operación de asalto a la prisión de Abu Graib, en Irak. Su grupo logró, utilizando suicidas con explosivos, abrir las puertas de la cárcel y liberar a 1.500 reclusos. Tras finalizar la misión regresó a Siria y, posteriormente, a Málaga. Nada más pisar suelo español fue detenido, acusado de pertenencia a organización terrorista.
Otro retornado, Abdelmalek Tanem, cayó en abril. De 25 años y con nacionalidad francesa y argelina, fue detenido en Almería. Había formado parte de la organización terrorista Jabhat al Nusra (la rama oficial de Al Qaeda en Siria). No obstante, desde octubre de 2013 a enero de 2014 formó parte también de Estado Islámico (IS). Actuó como combatiente y como «facilitador», para ayudar a cruzar la frontera turco-siria a los que querían incorporarse a las tramas yihadistas.
MUJERES
La operación Kibera, realizada por la Policía en agosto pasado, fue la primera en la que se detuvo a mujeres en España que pretendían viajar a las zonas de conflicto para incorporarse al IS. Dos fueron las capturadas, en Melilla, una de ellas menor de edad. Tenían la intención de iniciar una ruta que, desde Marruecos, las llevaría a Siria. Ambas habían sido captadas a través de las redes sociales, utilizadas desde sus teléfonos móviles.
El mes pasado volvió a repetirse la historia: la Policía, en una actuación conjunta con Marruecos, desmanteló una célula de captación. Entre los siete detenidos, cuatro mujeres (de nuevo una menor de edad): una en Ceuta, dos en Melilla y una más en Barcelona.
La red se dedicaba a la captación de mujeres para el IS. De nuevo, se nutrían de usuarias de redes sociales. El proceso se realizaba en tres fases. En la primera, las reclutadoras activas insertaban mensajes, anzuelos que llamaban la atención de las jóvenes. Denunciaban una supuesta crisis de valores en la sociedad occidental actual. En la siguiente fase, la de selección, las víctimas elegidas eran redirigidas a foros privados de Whatsapp cuyas administradoras eran las reclutadoras activas. Allí, ya, se utilizaban «consignas de reprogramación». En la fase final, las medidas de seguridad en los contactos se multiplicaban para avanzar en la fase de reclutamiento. Era sólo entonces cuando podían producirse encuentros personales.
Posteriormente, se averiguó que esta red había mandado a territorios sirios controlados por Estado Islámico a un total de 12 chicas.
Los investigadores entienden que las mujeres reclutadas (todas ellas jóvenes) iban a ser utilizadas o explotadas sexualmente como «mujeres de los yihadistas», siendo absolutamente ajenas a lo que se les avecinaba debido a su juventud y a la manipulación de la que estaban siendo objeto.
CAPTADORES
Durante el pasado año, las operaciones contra las células dedicadas a la captación de adeptos se sucedieron, como ya ocurría en años anteriores.
La primera de estas actuaciones se produjo el pasado mes de marzo, la denominada operaciónAzteca. La Policía detuvo a los siete integrantes de la trama, que se dedicaba a la captación de combatientes con destino a Siria y Mali y que estaba activa desde 2012. Su líder, Mustafá Maya Amaya era un español de etnia gitana convertido al Islam, inválido y en silla de ruedas. El uso de las redes sociales era el medio habitual no sólo para comunicarse, sino también para realizar el reclutamiento de adeptos.
Otra de las operaciones más importantes –Javer– se culminó después de meses de investigaciones el pasado mes de mayo. Seis integristas fueron detenidos en Melilla. Formaban parte de la plataforma denominada Sharia4Spain que posteriormente cambió de nombre y se denominó MillatuIbrahimEspaña, dedicada a la captación, adoctrinamiento, preparación física y envío de voluntarios yihadistas con destino a países en conflicto. Eran enviados a Mali. Las redes sociales, y también el entorno de la mezquita Assalam de Melilla, eran sus centros de reclutamiento. Lograron enviar a cuatro ex militares y a un ex policía nacional.
La operaciónGala, llevada a cabo en junio, puso fin a las andanzas de otra red de captadores. Esa actuaba fundamentalmente en Madrid. Nueve fueron los detenidos y otros nueve los yihadistas que habían logrado enviar a Siria, para combatir con el IS. El jefe de la célula era Lahcen Ikassrien, antiguo yihadista en Afganistán que fue reclutado por Imad Eddin Barakat Yarkas, Abu Dahdah, que estuvo estrechamente relacionado con Amer Azizi, ambos destacados activistas de Al Qaeda en España. Tenían vínculos con investigados por la masacre del 11-M, como es el caso de Said Berraj. Esta célula captó a Ismail Afalah, hermano de uno de los implicados en la masacre de Madrid y a quien se ubica combatiendo en Siria.
ENALTECIMIENTO
Policía y Guardia Civil no han bajado la intensidad en la presión contra aquellos que se dedican a realizar actos de enaltecimiento y exaltación de terroristas y de sus crímenes. Es el caso de la operaciónOrdal, en la que fue detenido en Badalona (Barcelona) el marroquí Redouan Zougam. Enaltecimiento y justificación del terrorismo yihadista fueron las acusaciones. Las redes sociales eran su reino y desde allí difundía consignas y aplaudía las acciones de los terroristas.
No fue el único. En junio fue detenido por la Guardia Civil en Huelva Kamal Joao Carlos Luzito, de 29 años y de origen marroquí. Era usuario de un foro yihadista denominado Jamia Hafsa Urdu Forum, lugar desde el que se reivindicaba la reconquista de Al-Andalus y enviaba mensajes para reclutar radicales y conseguir financiación. Difundía propaganda yihadista relacionada con los talibán afganos como Tehreek-e-Taliban Pakistán, el movimiento islámico de Uzbekistán y otros grupos que operaban en Afganistán.
Ese mismo mes la Guardia Civil capturó en la barriada de El Príncipe, en Ceuta, a Hamido Hamido Mohamed. Utilizaba las redes sociales, principalmente Facebook, donde colgaba vídeos y fotografías vinculadas con el terrorismo yihadista y hacía exaltación de los principales líderes terroristas de carácter extremista, como Osama Bin Laden, Abu Musab Al Zarqawi o Abu Bakr al Baghdadi, líder de IS. Se le incautó un arma en el momento de su detención.
En noviembre fue capturado en Murcia Nabil B. marroquí de 34 años. Era el usuario de varios perfiles en redes sociales desde los que difundía ideas radicales propias de la yihad global. Había intentado sin éxito viajar a Siria en varias ocasiones.