ABC – 10/09/16
· El «cese de hostilidades» incluye operaciones conjuntas contra Daesh y Al Nusra.
· Los ataques compartidos entre ambos países sólo tendrán lugar si se consolida el alto el fuego.
Estados Unidos y Rusia alcanzaron anoche un acuerdo para el alto el fuego en Siria y para iniciar operaciones militares conjuntas contra las organizaciones yihadistas que operan en la zona, Daesh y Al Nusra. Esta segunda parte del pacto estaría condicionada a que el «cese de hostilidades» se cumpla de manera efectiva a partir del lunes, cuando comienza de manera oficial. El entendimiento, anunciado por el secretario de Estado, John Kerry, y por su homólogo ruso, Serguéi Lavrov, compromete al Gobierno sirio a poner fin a las misiones de combate en las zonas que controla la oposición.
El acuerdo supone la culminación de dos intensas semanas de negociaciones, que tutelan los respectivos bloques en la zona, en un hotel junto al lago Leman, en Ginebra. En palabras de Kerry, el plan suscrito por ambas partes «debe permitir reducir la violencia y abrir una paz negociada y una transición política en Siria».
La salida del dictador Bachar al Asad, mediante un diálogo con la oposición ha sido siempre la principal exigencia de Estados Unidos para dar una solución a una guerra que dura ya más de diez años y se ha cobrado la vida de cientos de miles de personas y casi cinco millones de refugiados. Lavrov se comprometió delante de Kerry a que el Gobierno sirio cumpla con su parte de dialogar con la oposición: «Damasco está preparado para aceptarlo».
Estados Unidos y Rusia han establecido un centro de operaciones compartido para combatir a Daesh, objeto de ataques en Siria e Irak por parte de Estados Unidos y sus aliados desde hace año y medio.
Entrada de ayuda en Alepo
El plan de «cese de hostilidades» pactado requiere la entrada a las zonas sitiadas y a áreas de difícil acceso, incluida la ciudad de Alepo, bastión de la oposición siria y la zona más castigada por los ataques, por parte de las tropas de Al Assad, que ha originado la principal fuente de desplazados de la guerra. En Alepo permanecen cerca de 300.000 personas.