LA RAZÓN, 4/4/12
Los terroristas tienen redactado el texto que publicarán en el «Aberri Eguna»
MADRID-«Tenemos abierta la posibilidad de ser libres». La enigmática frase, contenida en el comunicado que ETA hizo público en abril del año pasado, como motivo del «Aberri Eguna» («Día de la Patria Vasca»), cobra toda su significación un año después.
La banda hablaba, sin revelar ningún dato, de la negociación que, a través de intermediarios, mantenía con socialistas y nacionalistas. Desde entonces, las cosas han cambiado. Expertos antiterroristas, consultados por LA RAZÓN, creen que, en el comunicado que ETA hará público en los próximos días, con ocasión del «Aberri Eguna» de este año, que se celebra el domingo, se hará un balance bastante negativo de los últimos doce meses, pese a la generosidad demostrada por el anterior Gobierno (el de Rodríguez Zapatero y Pérez Rubalcaba), con la legalización de Bildu.
Las demás «promesas», en especial las relativas a los presos de la banda, no se han cumplido. En cualquier caso, agregan, la banda siempre tiene cartas escondidas en la manga y, en función de sus conveniencias, sorprender a propios y extraños.
Sin disolución
No se espera ahora, como ocurrió hace un año, que anuncie su disolución o que pida perdón a las víctimas, aunque podría ofrecer algún tipo de gesto, siempre a cambio de que el Gobierno negocie con ellos un «desarme» bilateral y el asunto de los presos.
La intensificación del terrorismo callejero, con casi medio centenar de actos delictivos desde el supuesto fin armado de ETA, en octubre del año pasado; el nerviosismo de los presos, que incluyen a la llamada «izquierda abertzale» entre los culpables de lo que les ocurre y no sólo al Gobierno de Mariano Rajoy; y la negativa del Ejecutivo a negociar, configuran un panorama al que no es ajena ETA, que controla tanto la «kale borroka» como a los presos. El comunicado debería, por lo tanto, ser un reflejo del malestar que existe en sectores, cada día más amplios, de su mundo.
Las fuentes consultadas subrayan que hemos llegado a esta situación por las expectativas (y promesas) que, de forma irresponsable y por conveniencias políticas, se hicieron llegar a ETA a cambio de que anunciara el alto el fuego y supuesto cese armado. Asimismo, que se les diera a entender que el Partido Popular estaba de acuerdo y que, en caso de que ganara las elecciones, el «proceso» continuaría sin problemas, lo que no era cierto, como ha quedado demostrado.
La lectura del comunicado de abril del año pasado demuestra que los terroristas se habían «tragado el anzuelo», ya que incluían frases como las siguientes: «Tenemos la posibilidad de ser libres»; «en estos últimos meses se está abriendo un nuevo tiempo, lo estamos abriendo. En la base de los pasos que se están dando se halla el reto de tener abierta la puerta de la libertad, a traspasarla. Ciertamente, a pasar de la situación de opresión actual a la situación democrática que descansa en la territorialidad de Euskal Herria y en el reconocimiento del derecho a decidir».
Independencia
Es decir, la banda consideraba que las negociaciones que estaban en marcha entonces les abrían el camino a sus grandes objetivos: la independencia del País Vasco, con la anexión de Navarra (lo que llaman la territorialidad); y el acercamiento de sus presos, como paso previo a su excarcelación.
En el comunicado del año pasado, los terroristas hacían, incluso, planes de futuro: «Con la apertura de la oportunidad de independencia, para el conjunto de los abertzales será misión obligada el hacer defensa de Euskal Herria. Sí, si al menos queremos seguir siendo aún un pueblo, cuando estamos abriendo la posibilidad democrática de elegir la independencia».
«ETA, y, en general, la izquierda Abertzale han arrostrado el desafío con osadía y llenos de ilusión y de esperanza. Con la misma determinación y vigor mostrado en los momentos más duros de la lucha. (…) Será un camino largo, difícil y duro, porque necesariamente se deberá hacer un esfuerzo y una lucha pareja a la medida del objetivo de la consecución de la libertad».
Largo, duro y difícil
Esta última referencia, («largo, duro y difícil»), parafraseando una afirmación del anterior presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, suscitó variados comentarios hace un año. La banda, se limitaba a hacer suyas las complicaciones que la «hoja de ruta» de las conversaciones, abiertas en 2006 (y que, de alguna manera, permanecían abiertas) conllevan, como cualquier negociación.
Historia de una trampa
24 – abril – 2011
Hace público un comunicado en el que reitera su alto al fuego como «un compromiso firme» con un «proceso de solución definitivo».
12 – julio – 2011
Seis meses después de anunciar el alto al fuego, ETA confirma su disposición «a profundizar en el camino emprendido».
1 – octubre – 2011
Manda un comunicado al diario «Gara» en el que anuncia que «adopta el compromiso de colaborar con la Comisión Internacional de Verificación».
20 – octubre – 2011
A tan sólo un mes de las elecciones ETA anuncia el «cese definitivo de la actividad armada» y hace un llamamiento a España y Francia para que dialoguen.
LA RAZÓN, 4/4/12